Las cuatro mayores patronales agrarias, que representan a cerca de 290.000 productores, iniciaron a las cero horas del sábado una huelga comercial de cinco días que mantiene afectado al país
El Gobierno argentino criticó la huelga comercial del sector agropecuario argentino por responder a fines electorales y acusó a los líderes agrarios de buscar «protagonismo» de cara a los comicios legislativos del próximo 27 de octubre.
«Los muchachos se despiertan antes de las elecciones. Son parte de un esquema político», respondió el ministro argentino de Agricultura, Norberto Yauhar, al ser preguntado sobre el cese de comercialización de granos y ganado por el diario oficialista Tiempo Argentino.
Huelga de 5 días
Las cuatro mayores patronales agrarias, que representan a cerca de 290.000 productores, iniciaron a las cero horas de este sábado una huelga comercial de cinco días, que afecta a todos los productos agrarios excepto los perecederos.
Los productores señalan que el objetivo del paro es ser recibidos por la presidenta Cristina Fernández para exponerle sus reclamos.
De no concederles una audiencia «el plan de protesta continuará», dijo hoy a radio Mitre el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Rubén Ferrero.
Ferrero avanzó que el próximo martes se reunirá con sus pares de la Federación Agraria Argentina (FAA), la Sociedad Rural Argentina (SRA) y la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) para evaluar la protesta y decidir nuevas medidas de fuerza.
La primera jornada de la huelga comercial se llevó a cabo sin incidentes y no se registraron cortes en las carreteras, a diferencia de lo ocurrido durante el grave conflicto rural desatado en 2008 tras la imposición de fuertes impuestos a las exportaciones.
Acabar con
el «kirchnerismo»
Yauhar, candidato a las elecciones por la provincia sureña de Chubut, señaló que las reivindicaciones de los líderes agrarios responden a «proyectos personales» y destacó que no existe un proyecto alternativo al del Gobierno en cuestiones agropecuarias.
«Está totalmente atomizado, creo que es una sumatoria de treinta nombres que están dando vueltas con 30 proyectos individuales y personales y con un solo objetivo: que se vaya el kirchnerismo, es lo único que los une», sostuvo el ministro durante la entrevista.
Las entidades agrarias se quejan de la «tremenda» brecha que existe entre la «miseria» que cobra el que produce y lo caro que pagan los alimentos en las góndolas de los supermercados quienes los consumen.
Esa brecha, precisaron, es del 300 al 1.200 por ciento en productos de primera necesidad como el azúcar, la yerba, manzanas, peras, arroz, melocotones, ciruelas, lácteos, carnes en general, verduras, cítricos y harina, entre otros.
Los dirigentes reclaman la normalización del comercio de granos, la eliminación de los permisos de exportación y la disminución de la presión impositiva sobre el campo, entre otras medidas.
Argentina es uno de los mayores productores y exportadores mundiales de granos y cerrará esta campaña agrícola con una cosecha de 102,6 millones de toneladas, la segunda mayor de su historia, según datos del Ministerio de Agricultura.
Agencias