Vivir en este conjunto de edificios ubicado en San Agustín del Sur se ha convertido para sus habitantes en un desafío, pues tienen que soportar las constantes balaceras cuando se enfrentan grupos de antisociales rivale
Así como algunos guareneros bautizaron el complejo habitacional Ciudad Belén como “Ciudad Balín” ubicado en el municipio Plaza del estado Miranda, de igual forma los habitantes de Terrazas del Alba en San Agustín del Sur, Municipio Libertador apodaron su conjunto residencial como “Terrazas el Hampa”, calificativo que informalmente tiene desde hace cuatro años por los constantes enfrentamientos entre bandas rivales que residen en el mismo urbanismo.
El estruendo de los tiros forma parte de la convivencia de los habitantes, que afecta a toda la población que habita en este complejo habitacional, porque desde el año 2008 las armas de fuego llegaron a manos de los miembros de las mencionadas bandas y se incrementó su capacidad delictiva, lo que condicionó la vida de los vecinos, como mantenerse mayormente encerrados en sus apartamentos y llegar muy temprano a sus hogares, aseguró una habitante, quien quiso mantener su nombre en reserva.
Detalló que por lo general muchos de los residentes evitan salir de sus viviendas después de las 6:00 de la tarde, con la finalidad de evitar encontrarse con estos grupos delictivos en pleno tiroteo, aunque “algunos hemos tomados precauciones, el poco ingenio y la falta de prudencia de otros ha desencadenado en los últimos meses un total de cinco muertes, todas de personas inocentes”.
Altamente armados
Aunque ningún residente se ha atrevido a levantar una denuncian en contra de estos sujetos, los cuales han convertido el complejo habitacional es un escenario de guerra, ésta problemática se ha denunciado ante la Alcaldía de Libertador, pero aún no han tomado medidas para atender ésta terrible situación con la presencia de cuerpos policiales, “por lo que vivimos azotados por dos grupos delictivos”, lamentó la vecina.
Cuenta que la preocupación que embarga a los vecinos, además de la cantidad de armas que poseen estas bandas rivales a la hora de retarse que en su mayoría termina acabando con vidas inocentes, es el alto poder de fuego y calibre del armamento, que por lo que se evidencia a simple vista que las pistolas y armas largas reúnen características de ser altamente sofisticadas.
“Un ejemplo de ello fue cuando un hombre celebraba su cumpleaños en el piso cuatro de una de las torres y según cuentan vecinos, una bala atravesó una de sus paredes internas del apartamento y minutos después que se levantó del piso pensando que había cesado el tiroteo, fue alcanzado por una bala en la espalda”, narró otra vecina del conjunto residencial, quien presume que el proyectil venía directo de una torre ubicada a una considerable distancia, justamente donde reside una de las “bandas que se cae a tiros con la del frente”.
Música y droga es
otro mal de morir
“Además que tenemos que soportar el desagradable olor de marihuana que consumen jóvenes que residen en Terrazas del Alba de San Agustín del Sur, también tenemos que dormir con música a alto volumen con inmensas cornetas que las colocan en plena calle obstruyendo el paso vehicular, justamente ésta conducta se evidencia cuando los niveles de droga se les suben a la cabeza”.
Así lo denunció un vecino, quien indicó que estos muchachos irrespetan a cualquiera que les llame la atención, “y tampoco se puede notificar a la policía porque toman represalias contigo… Vivir aquí no es nada fácil, pues las normas de convivencia nunca existieron en este conjunto residencial y todo el tiempo matan a inocentes”.
Inseguridad en
el Metrocable
La inseguridad también se ha hecho presente en el Sistema de Metrocable Parque Central -San Agustín del Sur. El pasado domingo 1 de marzo, un oficial de la Policía Nacional Bolivariana, que respondía al nombre de Hamilton José Wikilson Gil, de 28 años, fue asesinado mientras cumplía labores de seguridad en la estación La Ceiba.
Presuntamente, el oficial fue alcanzado por un proyectil en la cabeza, proveniente de un enfrentamiento entre dos bandas delictivas que hacen vida en el sector, dejándolo sin vida instantáneamente.
Algunos vecinos también denuncian que frecuentemente se presentan robos y atracos durante los viajes de este sistema, donde supuestamente los delincuentes armados someten y amenazan a sus víctimas mientras están entre las estaciones del sistema, bajándose luego “como si no pasara nada”. Esta situación ha causado que muchos dejaran de utilizar este medio de transporte a fin de evitar caer en manos de la delincuencia.
Mairy Chourio