María Cuicas murió esperando que la Gobernación Mirandina ejecutara la orden del Tribunal Superiod Octavo de lo Contencioso Administrativo de la Región Capital con sede en Caracas, sobre el pago de sus prestaciones y el cuidado del Estado
La primera profesional licenciada en Música, que decidió hacer carrera docente en Barlovento, para crear las orquestas sinfónicas, fue María Auxiliadora Cuicas, a quien la muerte la sorprendió de manera violenta y trágica el pasado jueves 27 de junio en horas de la noche, luego de enfrentar la inseguridad reinante en las carreteras de Miranda. Venia de Barquisimeto, donde había recibido una transfusión de sangre tratamiento que recibía por la enfermedad del cáncer que ya venía superando, y regresaba a gestionar el dinero que reclamó a través de La Voz, hace apenas tres semanas a Gobernación, para hacerse otros exámenes y no recaer de nuevo, decidió quedarse en la encrucijada de El Guapo, donde esperaba el transporte para regresar a Río Chico.
Le llegó la muerte en la espera
María murió esperando que la Gobernación Mirandina ejecutara la orden del Tribunal Superiod Octavo de lo Contencioso Administrativo de la Región Capital con sede en Caracas, sobre el pago de sus prestaciones y el cuidado del Estado para con ella que padecía de un cáncer de cuello uterino, decisión emanada del tribunal desde el año 2012 y que la Gobernación de Miranda se negó a ejecutar ta decisión pues aun continuaba la querrella para cobrar mas de tres años de salarios caidos.
Lejos de su familia
Amaba a los niños por los cuales prefirió vivir lejos de su familia, a pesar de su enfermedad. Su primera orquesta creada en Barlovento fue la de la población de Panaquiere hace 18 años, Municipio Acevedo, de allí se desprendieron otras orquestas a lo largo y ancho de cada Municipio. La envidia, el sectarismo, la ambición y el machismo la llevaron a entregar cada núcleo a sus respectivas alcaldías, algunas tomaron las riendas de los jóvenes músicos, otras se quedaron en el recuerdo y el olvido.
Tras ser operada
Hace dos años y medio regreso a Barlovento luego de ser operada, de recibir quimioterapia y de recuperar fuerzas, dijo en una entrevista, con la intención de la fundación de formación que dirigía, pero los niños estaban esperando su regreso y sin ningún tipo de ayuda financiera, comenzaron a trabajar de nuevo tan solo con el apoyo de los padres y representantes que le metieron el hombro para satisfacer a sus hijos, pues como lo declaro una representante «en Río Chico no hay donde llevar a los niños a hacer algo diferente».
Era la única docente en música que se dedicaba a dar clases de piano para bebes, niños de 4 años en adelante, contaba con varias alumnas, que estaban super entusiasmadas. Ni que hablar de una jovencita de 19 años con síndrome de Down, quien tan solo con dos meses recibiendo clases, estaba tan aventaja que pronto pasaría a tocar un instrumento musical.
La información cayó como un rayo que penetro en el alma de sus amigos, de sus familiares y sobre todo de sus alumnos, quienes le rinden homenaje en la sede de la Fundación durante todos estos días. Los restos de esta hermosa mujer, adoradora de las notas musicales, fueron llevados a su ciudad natal Barquisimeto.
Barlocom