Un intenso tiroteo avisaba a los habitantes de lugares cercanos al Instituto Nacional de Orientación femenina (INOF) que algo extraño ocurría. Al menos seis ráfagas de tiros se escucharon entre las 10:00 y 11:00 a.m. de este lunes.
Un fuerte despliegue policial y militar tomó las inmediaciones del penal desde los muros que protegen el recinto carcelario y se internó en la zona boscosa de Ramo Verde. Buscaban a un grupo de reclusas que se habrían evadido del penal a través de un muro perimetral que saltaron.
El número de internas evadidas no fue precisado pero en fuentes extraoficiales se conoció que se trataría de seis internas, mientras que familiares de reclusas estiman que serían más de 10 según informaciones internas.
Reseñaron que desde la entrada del reclusorio se escucharon gritos y consignas de las otras privadas de libertad que presuntamente presionaban para que digan el paradero de sus compañeras.
Al parecer, luego de atravesar una montaña el grupo de internas huyó por el río San Pedro donde cuatro de ellas fueron recapturadas por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana que estaban desplegados por la zona montañosa del sector Ramo Verde, colindante con la carcel de féminas.
Desde hace al menos dos semanas las privadas de libertad han venido denunciado a través de sus familiares las condiciones en que se encuentran dentro del recinto, donde son “maltratadas por los custodios y los efectivos de la GNB”. Esta situación sería una de las causas de la fuga masiva, aunque se conoció que la semana pasada habrían metido en la celda de máxima seguridad y castigo conocida como “El Tigrito” a unas internas que se negaron a acatar la orden de la directiva que había amenazado con “suspender las visitas de pareja y las familiares limitarlas a una por mes”, sentenció la fuente interna.
Se intentó contactar a las autoridades del reclusorio femenino así como del Ministerio del Poder Popular para Asuntos penitenciarios pero no respondieron la llamada desde este rotativo. Tampoco fue confirmada la recaptura de las evadidas por fuentes oficiales del penal.
Familiares desesperados esperan que la situación se estabilice, pues les perturba el hecho de que algún miembro de su familia esté siendo maltratado.
Pola Del Giudice Ortiz
