El presidente de Bolivia, Evo Morales, dijo este jueves que no bastan las disculpas de los países europeos que le prohibieron el martes el uso de sus espacios aéreos, cuando retornaba a La Paz de Moscú, y anunció que su país tomará medidas ante organismos internacionales.
«No bastan sólo las disculpas de algún país que no nos permitió pasar por sus territorios», afirmó Morales que retomó temprano este jueves sus actividades oficiales, con actos públicos, tras llegar a La Paz el miércoles, procedente de Viena.
Francia, España, Italia y Portugal le revocaron temporalmente autorizaciones de vuelo, cuando Morales viajaba desde Rusia, donde participó de un foro de países productores de gas natural, ante sospechas de que transportaba al prófugo estadounidense informático Edward Snowden, buscado por Washington.
Sólo el Ministerio de Relaciones Exteriores francés manifestó su «pesar» por el «contratiempo», mientras el presidente François Hollande dijo que autorizó «inmediatamente» que el avión presidencial boliviano sobrevolara Francia cuando supo que el presidente Morales estaba a bordo.
Después de gestiones bolivianas, Lisboa, Madrid y Roma autorizaron que la nave presidencial surcara sus cielos, pudiendo retornar a La Paz el miércoles.
Morales, quien participó de un acto en el poblado cocalero de Shinaota, en el centro del país y su feudo político, señaló que «lo que pasó estos días no es una casualidad, no es un error, algunos gobiernos piden disculpas, (dicen) que es un error, pero no es error».
Señaló que se siente contrariado por lo que sufrió.
«No aterrizo cuál era el objetivo central, ¿sólo asustarme? ¿acallarme? ¿intimidarme? ¿cuál era la meta?» inquirió Morales y negó que haya pasado por su mente sacar a Snowden de Moscú, donde se encuentra en tránsito desde hace más de 10 días, para llevarlo a Bolivia.
Snowden, excontratista de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) estadounidense, fue acusado de espionaje por su país tras filtrar a la prensa un programa mundial de espionaje informático, presentó pedidos de asilo a una veintena de países.
«Imposible, imposible» aseguró el gobernante sobre la posibilidad de traerlo a Bolivia en su avión presidencial, luego de abrir el martes la posibilidad de conceder a Snowden asilo político.
También reiteró que un equipo político y jurídico del gobierno boliviano analiza las acciones legales internacionales, porque en su caso -insistió- se violaron tratados internacionales.
Bolivia también ha convocado a los embajadores de Francia, Italia y España y al cónsul de Portugal para que expliquen el incidente, mientras el oficialismo tramita en el Congreso un pedido a la cancillería para la expulsión de los diplomáticos.
AFP