Los más afectados resultan ser los comerciantes que deben exhibir la mercancía rodeados de moscas y de la hediondez que emana de los desechos sólidos
Un nuevo llamado de emergencia hacen desde la urbanización «Alejandro Oropeza Castillo» hacia la Dirección de Servicios Públicos del Municipio Plaza, estado Miranda, por motivo a que se agudiza el problema de la basura en esta comunidad, convirtiéndose este en un factor contaminante para la población.
Dadas las múltiples denuncias que han llegado a la redacción, el equipo de La Voz se trasladó hasta el lugar, específicamente al sector 1 del antes referido urbanismo, a donde las moscas y los gusanos han pasado a ser como un vecino más para quienes ya la situación se está volviendo insoportable.
Los dejaron
embarcados
El sector 1 de la urbanización «Alejandro Oropeza Castillo» de Guarenas, tiene más de 25 años de fundado. En el residen alrededor de 200 familias que afrontan diversas irregularidades de servicio, entre las cuales se puede mencionar la deteriorada vialidad, los recurrentes colapsos de tuberías de aguas blancas y la falta de limpieza de drenajes.
Sin embargo, la presencia de la basura es un mal recurrente para los habitantes de la zona que ya han elevado su clamor ante las autoridades. Todos son afectados, pero la peor parte se la llevan los comerciantes y en especial los que venden alimentos, pues exponen la mercancía a merced de la contaminación y tratando de sortear la entrada de las moscas. Los desechos sólidos se pueden ver la mayor parte del tiempo en el estacionamiento del lugar.
Así lo afirmó Giovanny Moreno, encargado de la panadería del sector, al tiempo en que aseguraba que hace pocos días recibieron la visita de Irving Ríos, director de Servicios Públicos Plaza, quien al parecer se comprometió a aportar soluciones. No obstante, asegura que los dejaron «guindando».
«Dijo que estaría aquí el lunes o martes de esta semana, pero nos hemos quedado esperándolo. Queremos que se entienda que como personas que prestamos un servicio al consumidor, nos sentimos responsables de vender en medio de las moscas, sabiendo lo contaminantes que son estos insectos voladores que se multiplican en cuestión de horas. Pero estamos de manos atadas porque no podemos desaparecer como por arte de magia la basura que se acumula», indicó el entrevistado.
Griselda Noguera, quien también labora en un abasto de la comunidad, dijo que en varias ocasiones la situación ha sido reportada ante las dependencias municipales de rigor, sin que hasta la fecha se obtengan respuestas contundentes.
Dan ideas
Ya confesándose cansados del mal, los vecinos del sector 1 de «Oropeza Castillo», han propuesto que no sea el estacionamiento de la zona en donde se coloquen los desechos producidos por quienes allí residen, sino que se traslade hacia un lugar aislado en donde ni los fuertes hedores, ni los gusanos, ni las moscas y tampoco las ratas hagan de las suyas.
En el estacionamiento funcionan dos líneas de transporte, una de moto taxistas y otra de jeeps, ambas que trasladan a los usuarios hasta la comunidad de Vista Hermosa.
Pudimos conversar con José Núñez, transportista que habló sobre la necesidad de que los desechos sólidos se ubiquen en un sitio retirado que sea de fácil acceso para todos.
«Aquí hay basura todo el tiempo. La recolección de la misma es irregular. Pasan unos días sí y otros no. Ya queremos darle a esto un punto y final, porque este es un foco de contaminación que le hace daño a cualquiera, pero sobre todo a los niños y niñas, y la población infantil aquí es muy grande», recalcó.
Los entrevistados también resaltaron la importancia que reviste el hecho de que los vecinos contribuyan y pongan su «granito de arena» para que la situación no se salga de control. Una manera de hacerlo es sacando la basura los días asignados para tales fines y no cuando le provoque al amo de casa. La observación la hicieron tomando en cuenta que a veces el camión del aseo se lleva los desechos e inmediatamente aparecen montones de bolsa en el lugar.
Yohadi Arteaga
yoha-@hotmail.com