En principio quiero recordar que el artículo anterior titulado: Televisión ¿A color o en blanco y negro? argumenté las ventajas de la capacidad sorprendente del ojo humano para percibir más de una centena de variedades cromáticas y no limitarnos al “blanco y negro”, aplicación que podemos llevar al terreno de las interpretaciones de las realidades.
Hecha esta analogía, es importante que abordemos el tema del desabastecimiento desde todas las perspectivas posibles. Sin embargo, a efectos prácticos y de espacio, dividiré en dos las causas que nos llevaron a la situación actual: estructurales y coyunturales.
Veamos las primeras. En Venezuela se triplicó el tamaño de la economía: El Producto Interno Bruto (PIB) pasó de $ 180 mil millones en 1999 a $ 380 mil millones en el 2011; 1999, el Gobierno venezolano ha invertido cerca de 500 mil millones de dólares en programas sociales en poco más de una década; el Índice de Desarrollo Humano (IDH) de la PNUD (Naciones Unidas) que mide el acceso a la salud, la educación, longevidad, calidad de vida, entre otros aspectos se triplicó entre 2000 – 20012, con respecto a la década de los 90.
Seguimos: La Reducción de las Tasas de Interés (llegamos a pagar hasta 80% de interés anual por un crédito, en la actualidad las tasas están entre un 15 y 30%). En el 2012 se inició el programa de construcción de viviendas más agresivo en los últimos tiempos: “Misión Vivienda”. Durante el 2012, se edificaron 350 mil viviendas. Al mismo tiempo, la producción de las empresas básicas(Aluminio, Hierro, Acero y Petroquímica) y caída de la producción de empresas expropiadas o nacionalizadas por mala gestión y falta de inversión.
Ahora veamos las causas coyunturales. En el último trimestre de 2012 se redujo significativamente la asignación de divisas oficiales (Cadivi) a los sectores productivos adicional, adicional a la suspensión Sitme (mercado gris). Sumemos a este hecho el pico de la demanda que se produce a fin de año, añádale las vacaciones colectivas de muchas industrias entre diciembre y enero, mézclelo con los feriados de Carnaval, Semana Santa y los días de luto por la muerte del Comandante Hugo Chávez Frías; agréguele seguidamente el incremento del salario mínimo, con una tipo de cambio extremadamente barato (favorece importaciones en detrimento de la producción nacional) y de guinda algunos factores climatológicos.
La consecuencia obvia: desabastecimiento, por un lado por el crecimiento de la demanda y el consumo sin precedentes en la historia de nuestro país y por otro lado, por la falta o limitada capacidad de producción de bienes y servicios que acompañen dicho crecimiento, lo que pudo paliarse con importación, pero ya los dólares no son suficientes y en consecuencia, se produce el desabastecimiento.
Miguel Pérez Abad