El cantautor ítalo-venezolano decidió desempolvar otra veintena de éxitos y organizó una fiesta en la que celebró la música y los ritmos latinoamericanos: «Franco De Vita de vuelta en Primera Fila», su próximo lanzamiento.
Será la primera vez que un artista lance un segundo «Primera Fila», un concepto presentado por Sony Music en 2008 de producciones en vivo grabadas en pequeños foros y públicos de unas 300 personas.
Para el nuevo proyecto, que reunió a unos 800 asistentes cada día, De Vita cantó temas que incluyen «Somos 3», «Traigo una pena» y «Contra viento y marea» con toques de rock, música tropical y una mezcla de country y polka, respectivamente.
Las interpretaciones individuales de De Vita resultaron poderosas y reafirmaron que el terreno en que se impone es el de las baladas, pero los momentos más álgidos (y de mayores retos) llegaron cuando el cantautor compartió el escenario con algunos colegas.
Uno de ellos fue con la estrella mexicana Trevi, con quien cantó uno de los dos temas inéditos de la jornada, «Te pienso sin querer».
«A Gloria casi no la escucho… Disculpen, pero no hicimos pruebas de sonido con Gloria», explicó el músico al público, quien los ovacionaba a ambos. «Mientras cambian la tarjeta (de la cámara) vamos a ensayar porque esta es la canción ‘single’ (el primer sencillo) seguramente», reveló el músico.
A diferencia de su anterior «Primera Fila», De Vita cambió la intimidad por una fiesta para celebrar los ritmos latinos con los que impregnó éxitos como «Ya lo había vivido», que interpretó con el dúo colombiano Gusi & Beto, que contagió a los asistentes con su vallenato pop.
Esa misma energía la logró con el puertorriqueño Victor Manuelle en «Traigo una pena», logrando trasladar a los presentes a los tiempos de las grandes orquestas salseras.
Uno de los momentos más emotivos se produjo cuando sus compatriotas de San Luis subieron al escenario.
«Vamos a hacer un guiño a Venezuela con el permiso de México. ¿Cuántos venezolanos hay en la sala?… Los suficientes para hacer bulla, porque lo próximo es un homenaje a Venezuela, pero todos los países latinoamericanos se pueden identificar», dijo De Vita como preámbulo de «Al norte del sur», que interpretó con instrumentos tradicionales de su país, como la bandola, el cuatro y las maracas.
AP