EL CAIRO. La jefa de la diplomacia de la Unión Europea intentó mediar el lunes entre los gobernantes de Egipto y los Hermanos Musulmanes para evitar más enfrentamientos letales en el país, pero ambas partes permanecieron inflexibles tras la muerte de 80 partidarios del movimiento islamista la semana pasada.
La jefa de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, en su segunda visita a Egipto en sólo 12 días, es una de las pocas personalidades de la comunidad internacional que pudo dialogar con ambas partes. La diplomática no hizo declaraciones sobre el contenido de sus reuniones.
Pero partidarios y opositores al derrocado presidente islamista Mohamed Mursi no dejaron dudas sobre la profunda polarización que vive la nación más poblada del mundo árabe.
«Es muy sencillo, no iremos a ninguna parte», dijo el portavoz de los Hermanos Musulmanes, Gehad El-Haddad, aclarando que el movimiento pretende desafiar las órdenes del Gobierno de dispersar una vigilia de protesta para exigir la restitución de Mursi en su cargo.
«Vamos a incrementar la protesta (…) Alguien tiene que darle sentido a este liderazgo», sostuvo.
Los partidarios de las fuerzas armadas que derrocaron a Mursi el 3 de julio estaban igualmente impasibles, pese a la matanza ocurrida al amanecer del sábado cuando las fuerzas de seguridad mataron a tiros a por lo menos a 80 seguidores de los Hermanos Musulmanes tras un día de choques entre bandas rivales.
Agencias