El 1º de agosto de 2012, el esgrimista bolivarense Rubén Limardo hizo historia en el deporte venezolano al ganar medalla de oro en la especialidad de la espada en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, tras vencer en una vibrante final al noruego Bartosz Piasecki, con marcador final de 15-10.
Este jueves 1º de agosto se cumple un año de la gesta de Limardo, quien ese día no sólo ganó la presea dorada, sino que además se convirtió en el primer latinoamericano, después de 100 años, en subir a lo más alto del podio olímpico.
El atleta bolivarense emuló al legendario boxeador Francisco «Morochito» Rodríguez, quien se colgó el oro en la categoría minimosca (48 kilogramos) en México 1968.
El espadachín zurdo ganó un combate con inteligencia y aplomo y supo atacar a su rival, que no tuvo respuesta ante la supremacía del criollo.
Al marcar el punto 15, que lo acreditó como el campeón olímpico, el nativo dejó salir toda la presión, saltó de emoción y corrió por todo el estadio londinense Excel con el Pabellón Nacional sobre sus hombros.
Sus familiares, que lo acompañaron en este periplo olímpico, lloraban de emoción por el extraordinario triunfo del guayanés. Incluso, el piloto venezolano de Fómula Uno, Pastor Maldonado, vibró de emoción con la memorable actuación del espadista.
Limardo se convierte en el segundo esgrimista latinoamericano en ganar un metal dorado tras 108 años. Antes de la gesta del venezolano, el último ganador de una medalla dorada fue el cubano Ramón Fonts en los Juegos Olímpicos de San Luis en 1904.
Ahora, con esta hazaña, Limardo forma parte de la historia del deporte de América Latina. Se convierte en el primer esgrimista en subir a lo más alto del podio y dar la medalla número doce para la patria de Bolívar.
El criollo, que ha participado en dos Juegos Olímpicos, se llevó los tres asaltos de la pelea. El primero lo ganó 4-3 y el segundo sacó ventaja y se fue arriba 8-3.
La victoria la construyó en el segundo asalto. En ese tramo, el guayanés llegó a hilar cuatro puntos seguidos y sacó una favorable ventaja que le sirvió para administrarse en el tercer y último asalto.
En su primer combate Limardo superó la ronda de los 32 mejores al vencer en un combate muy reñido al egipcio Ayman Fayez, con marcador de 15-13, en el último de los tres asaltos.
Luego avanzó a los cuartos de final en la espada masculina de los Juegos Olímpicos Londres 2012, al vencer al suizo Max Heinzer. Se recuperó luego de empezar abajo con parcial de 4-1. Ganó el primer asalto 5-4 y al final del segundo estaba en ventaja de 13-11.
Para llegar a la instancia final, el esgrimista clasificó a las semifinales de la espada en Londres 2012, al derrotar al número tres del mundo, el italiano Paolo Pizzo, con marcador de 15-12.
En la semifinal, derrotó con marcador final de 6-5 al estadounidense Seth Kelsey, quien venció a Silvio Fernández en cuartos de final.
Pero las alegrías al pueblo venezolano que ha brindado Limardo no se queda en la medalla de oro en las olimpiadas.
Actualmente, es el número 1 del ranking mundial de espada de Federación Internacional de Esgrima con 235 puntos, seguido por el suizo Max Heinzer (181) y el venezolano Silvio Fernández (178).
Además, se impuso en la Copa del Mundo de Buenos Aires y en la modalidad por equipos ganó medalla de oro, plata y bronce.
En 2013 ha participado en nueve competencias.
La próxima meta del criollo es coronarse en el Campeonato Mundial, que se llevará a cabo en Hungría a partir del 8 de agosto, el único logro que le falta al venezolano para completar la Copa del Mundo (campeón olímpico, número 1 del ranking mundial y campeón mundial).
De talla mundial y olímpica
En 2005, con 19 años, Rubén ascendió a la cima de la espada juvenil con una triple corona. Ganó el Campeonato Mundial, la Copa del Mundo y fue primero del ranking mundial en su último año en esa categoría.
Dos años más tarde, en los Juegos de Río 2007, se tituló campeón panamericano en espada individual y obtuvo plata en la prueba por equipos. Venezuela, representada por Limardo, Silvio Fernández y Wolfang Mejías, cedió ante Cuba en la final.
En los Panamericanos de Gualajara 2011, Rubén llegó nuevamente a la final individual pero esta vez se llevó la medalla de plata. También se adjudicó la presea plateada por equipos, junto a su hermano Francisco, Silvio Fernández y Jhon Pérez.
Con el equipo de espada clasificó a Beijing 2008, donde Venezuela quedó en el sexto lugar y logró un diploma olímpico.
La selección fue integrada por Rubén, Silvio Fernández y Wolfang Mejias, quien se lesionó en cuartos de final ante Francia y fue sustituido por Francisco Limardo.
Los venezolanos cayeron ante los franceses con marcador de 45-33, y luego ante los húngaros por 45-38 en el partido por el quinto lugar.