Un antes y un después marca para Venezuela y todo su Sistema Nacional de Orquestas Infantiles y Juveniles la participación histórica que han tenido en el Festival de Salzburgo, uno de los más importantes de la música clásica y que ha llevado a 1.400 criollos a exponer sus virtudes artísticas y todo el éxito de este proyecto del Estado, ante un exigente público, en la misma tierra donde nació el genio que fue Wolfgang Amadeus Mozart.
«Ya esto cambió. Ya el Festival de Salzburgo es otro, y para nosotros tanbién ha habido un cambio», resaltó este sábado el laureado director venezolano Gustavo Dudamel, quien por la noche cierra, con la interpretación de la séptima sinfonía del compositor bohemio-austríaco Gustav Mahler, las presentaciones en el evento de este año de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar, la más importante del país, tras cinco aplaudidos conciertos a casa llena.
Dudamel, en rueda de prensa ofrecida desde la ciudad austríaca, resaltó que esta exhibición del país y su Sistema de Orquestas, su tercera participación en el famoso Festival que se organiza desde hace casi ochenta años, «es un peldaño altísimo que hemos logrado y nos compromete más».
