Caso de espionaje podría ser llevado por Gobierno de Rousseff a la ONU
BRASILIA. Brasil no está satisfecho con las explicaciones dadas por Estados Unidos en relación a las denuncias de espionaje a ciudadanos brasileños y podría llevar el caso a Naciones Unidas (ONU), dijo el miércoles el ministro de Comunicaciones, Paulo Bernardo.
Las declaraciones se producen un día después de la visita del secretario de Estado estadounidense, John Kerry, a Brasil y antes de la visita de Estado que realizará la presidenta Dilma Rousseff a Washington en octubre.
«No nos satisfacen, hasta el momento, las informaciones, las explicaciones que nos dieron. Iremos a algún foro internacional, probablemente a alguna instancia de la ONU. Porque, sobre todo, consideramos que es un problema mundial», dijo Bernardo durante una audiencia pública en la Cámara de Diputados.
«Mi percepción es que la presidenta Dilma (Rousseff) debe llevar el asunto ante la ONU», dijo Bernardo luego a periodistas, agregando que las conversaciones sobre el asunto deben «extrapolar la discusión bilateral».
Kerry afirmó el martes durante su primera visita al gigante sudamericano como jefe de la diplomacia de Estados Unidos que «a Brasil se le deben respuestas y las tendrá».
Pero el ministro de Relaciones Exteriores brasileño, Antonio Patriota, dijo que su país necesita más que explicaciones sobre las recién reveladas actividades de vigilancia de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos sobre las comunicaciones digitales en todo el mundo.
Agencias