Como un “monumento a la hipocresía” calificó el diputado de la Asamblea Nacional por el estado Táchira Abelardo Díaz, el anuncio del presidente Nicolás Maduro Moros sobre la solicitud que efectuará al parlamento nacional de poderes especiales para legislar vía habilitante en materia anti corrupción.
“La mayor prueba de la gran hipocresía de esta solicitud, la encontramos en todo lo que ha ocurrido con la reforma de la Ley Orgánica contra la Corrupción, que una vez aprobada en primera discusión el 17 de mayo de 2011 y sale a consulta pública, el sector oficialista se percata que la misma prohibía el nepotismo en los cargos de la administración pública, lo cual afectaría el desempeño en altos cargos públicos de los Chávez, Flores, Cabello, Varela entre otras familias que han hecho del poder una agencia de empleos”, manifestó Díaz.
Recordó el parlamentario socialcristiano que la reforma de la Ley Contra La Corrupción fue consecuencia de un trabajo arduo, de mucho compromiso, diálogo y entendimiento por parte de la Comisión Permanente de Contraloría, presidida entonces por el profesor Héctor Navarro, “hasta el punto que sólo un artículo de toda la Ley no fue aprobado por unanimidad de los miembros que conformamos dicha comisión”.
Señaló Díaz que una vez que el diputado Pedro Carreño asume la presidencia de la Comisión Permanente de Contraloría se percata del contenido “anti nepotismo” de la Ley y «bajo una artimaña jurídica impide que el proyecto pase a segunda discusión y deciden enviarlo a la Procuraduría General de la República, donde la entonces Procuradora Cilia Flores, a quien hoy llaman primera combatiente, decidió no combatir la corrupción, hacerse de la vista gorda con este proyecto de ley y engavetó el proyecto de manera irresponsable en la Procuraduría, donde aún reposa”.
Agregó el diputado tachirense, que está solicitud de habilitante, sólo obedece a la estrategia distractora del gobierno para sacar de la opinión pública nacional los temas de agobian día a día a los venezolanos, como la inflación, devaluación, inseguridad, desabastecimiento, alto costo de la vida, desempleo, crisis de la salud, entre otros, considerando de igual forma “muy hipócrita, que ahora Maduro pretenda legislar contra la corrupción, cuando él fue diputado de la Asamblea Nacional durante ocho años y jamás impulsó un solo artículo de una Ley que buscara combatir este flagelo que hoy está acabando con la revolución”.