5 guardias de una hacienda fueron asesinados por el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) tras haber sido secuestrados el sábado
ASUNCION. Cinco empleados de una estancia del norte de Paraguay fueron asesinados en un ofensiva atribuida al grupo armado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), ocurrida sólo unos días después de la asunción del derechista Horacio Cartes a la presidencia.
Los guardias de la hacienda, ubicada a unos 280 kilómetros al norte de Asunción, fueron secuestrados el sábado y las autoridades encontraron sus cadáveres el domingo tras una intensa búsqueda. En el ataque también resultó herido un suboficial de policía, informaron las autoridades.
El Gobierno envió refuerzos policiales al lugar y dijo que trabajaría en conjunto con las fuerzas militares para acabar con el grupo, que ha sido responsable de asesinatos y secuestros durante la última década.
«La zona fue reforzada con personal tanto de orden táctico como de orden público (…) pero a partir de ahora el sigilo va a ser la norma; no podemos ir exponiendo la estrategia a todo el mundo», dijo el ministro del Interior, Francisco De Vargas.
«No vamos a dejar que el actuar de esta organización defina nuestras acciones», agregó.
El EPP es un pequeño grupo armado que reivindica la lucha de clases y sobrevive en los bosques gracias a una red de apoyo logístico que logró crear en la zona en la que opera: en los departamentos norteños de Concepción y San Pedro.
En los últimos años ha atacado comisarías y ha asesinado a policías y a supuestos delatores. Uno de sus últimos ataques fue el crimen de un conocido ganadero, al que había secuestrado dos años antes.
Cartes asumió la presidencia el jueves con la promesa de luchar contra la pobreza y las desigualdades. En su primer discurso dijo que ningún grupo armado marcaría la hoja de ruta de su Gobierno.
Agencias