Señalando que la brecha racial persiste en cuanto a la distribución de las riquezas, el mandatario dijo que «la sombra de la pobreza arroja otra sobre nuestra juventud» en muchas comunidades del país
WASHINGTON. El presidente de EE. UU., Barack Obama, alertó ayer de que el «sueño» de Martin Luther King «parece aún más difícil de alcanzar» que hace 50 años, al advertir de que la brecha racial persiste en cuanto a la distribución de la riqueza.
«La sombra de la pobreza arroja una sombra sobre nuestra juventud» en muchas comunidades del país, ejemplificó Obama durante un discurso para conmemorar los 50 años de la famosa frase «I have a dream» («Tengo un sueño») pronunciada por King en la marcha por los empleos y la libertad en Washington.
Posición estadounidense
Según el presidente, «la posición de todos los estadounidenses que trabajan, independientemente de su color, se ha erosionado». «Durante más de una década los trabajadores estadounidenses de todas las razas han visto estancarse sus salarios e ingresos. A pesar de que los beneficios empresariales se han disparado, así como los pagos a unos pocos afortunados, la desigualdad ha aumentado de manera constante», detalló.
Por tanto, a juicio de Obama, la «gran asignatura pendiente» hoy en día es asegurarse de que el sistema económico estadounidense ofrece «una oportunidad justa para la mayoría» y esa tarea «no será fácil».
La marcha en Washington de hace medio siglo «nos enseña que no estamos atrapados por los errores de la historia, que somos dueños de nuestro destino», enfatizó Obama, quien llamó a sus compatriotas a trabajar juntos y a «reavivar las brasas de la empatía».
«Sé que el camino será largo, pero sé que podemos llegar», pronosticó el presidente, convencido de que la misma «imaginación» que impulsó hace 50 años a King y a todos los que marcharon junto a él está presente en los jóvenes de hoy.
Retos pendientes
Pese a los retos pendientes, el mandatario admitió que EE. UU. «se volvió más libre y justo» gracias a la marcha y a las palabras de King.
Ese día «Estados Unidos cambió para ti y para mí», afirmó Obama ante la multitud congregada frente a las escalinatas del monumento a Lincoln en Washington, el mismo lugar donde King dio su histórico discurso el 28 de agosto de 1963.
Con sus palabras Luther King «dio una voz poderosa a las tranquilas esperanzas de millones» de personas, añadió el presidente estadounidense.
Agencias