El presidente del Parlamento Latinoamericano (Parlatino), Rodrigo Cabezas, expresó este jueves que América Latina debe trabajar «aceleradamente» para constituir una instancia propia de derechos humanos.
Su posición la dio a conocer a la salida de la presentación de los 100 primeros días de gestión de la directora del Hospital Universitario de Maracaibo, Nolis Fernández, realizada en el Salón de Conferencia de ese centro asistencial.
Expuso el representante del Parlatino que ante la salida oficial de Venezuela de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el pasado martes 10 de septiembre, «no hay nada que temer y pienso que hacia el futuro, lo importante es que América Latina, a través de la Unasur, trabaje en constituir una instancia propia».
Para Cabezas, América Latina tiene que tener su propia comisión de Derechos Humanos Latinoamericanos, sobre la base de la Celac o de la Unasur, cuya sede funcione en alguna capital de América Latina y no en Washington.
Manifestó que Venezuela se retiró de un ente cuyas últimas resoluciones muestran claramente la intencionalidad política.
«Retirarnos de la CIDH, es salirnos de un ente cuya función es política. Es separarnos de una institución que controla, dirige y administra los Estados Unidos de Norteamérica, cuyas últimas resoluciones son políticas, como el haber defendido a Carmona Estanga, quien dio un golpe de Estado contra de nuestro país», subrayó.
Destacó que para los habitantes del país, lo importante es que la garantía de los derechos humanos la da un gobierno humanista y la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, pero, «en el caso que algún ciudadano quisiera apelar una decisión o que se sintiera vulnerado en sus derechos, podría ir a la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, de la cual seguimos formando parte».