Dos jóvenes de 18 años de edad se causaron heridas mutuamente. Ambos fueron llevados a un centro de salud de la zona donde recibieron atención médica
En la Sala de Guarda y Custodia de Aprehendidos del Centro de Coordinación Policial Número 2 de Polimiranda, ubicado en Charallave, dos jóvenes de 18 años de edad se causaron heridas mutuamente como medida de protesta para exigir su traslado a los centros penitenciarios del país.
El comisionado jefe Leopoldo Robles, Director de Operaciones de la Policía de Miranda, explicó que los ciudadanos tuvieron que ser trasladados hasta un centro asistencial para ser evaluados por un galeno. “Estos detenidos intentaron llamar la atención de las autoridades causándose las lesiones, uno de ellos, presentó una herida que ameritó seis puntos de suturas, pero al regresar a la celda se agredió nuevamente y se quitó la sutura”, dijo.
Robles detalló que este tipo de actuaciones tienen como origen el confinamiento en sitios no adecuados y el retardo procesal.
“Afortunadamente, los 41 aprehendidos que permanecen en Charallave depusieron su actitud. No obstante, la situación en los calabozos de la Comandancia General persiste con la huelga de hambre de los detenidos desde inicio de semana. Representantes del Ministerio Público y Defensores de Derechos Humanos conocen la situación”, informó
En tal sentido, la autoridad policial acotó que dentro de los manifestantes se encuentran 3 féminas, 47 hombres y 14 adolescentes. “Este lugar está destinado para albergar a solo 25 personas y actualmente hay 64. Ayer se iban a trasladar a algunos para sus audiencias, pero se negaron, alegando que no dejarán la protesta hasta que se les asigne un cupo en algún penal. Nos encontramos monitoreando muy de cerca la salud de los detenidos. Los familiares apoyan la huelga porque saben que sus allegados no están en las instalaciones más apropiadas, pues el hacinamiento es evidente”, dijo.
Llamado al Ministerio
de Servicios Penitenciarios
El director de Operaciones de la policía regional, Leopoldo Robles, hizo un llamado al Ministerio de Asuntos Penitenciarios para que se ocupe de atender los casos.
“Tenemos ciudadanos que están detenidos aquí desde hace un año cuando deberían permanecer sólo 72 horas”, dijo el funcionario de Polimiranda.
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