El cadáver de Frander Arturo de Jesús Bastidas Martínez, de 22 años quedó tendido este martes en la avenida San Martín, esquina de Angelitos, a la altura de Capuchinos. El joven fue asesinado a tiros cuando transitaba por el lugar, a escasos metros de una carpa del Dibise. De acuerdo a vecinos de la zona a las 6:20 de la mañana se escucharon múltiples disparos. Cuando los habitantes salían de sus residencias rumbo a sus lugares de empleo vieron el cuerpo tendido boca abajo en plena avenida.
Caracas, (Especial/AA). El cadáver de Frander Arturo de Jesús Bastidas Martínez, de 22 años quedó tendido este martes en la avenida San Martín, esquina de Angelitos, a la altura de Capuchinos. El joven fue asesinado a tiros cuando transitaba por el lugar, a escasos metros de una carpa del Dibise.
De acuerdo a vecinos de la zona a las 6:20 de la mañana se escucharon disparos, entre siete a ocho. Cuando los habitantes salían de sus residencias rumbo a sus lugares de empleo vieron el cuerpo tendido boca abajo en la avenida.
Los efectivos de la GNB destacados en el puesto del Dibise en la plaza Capuchinos acudieron al sitio y custodiaron el área a la espera del Cicpc. La víctima sostenía en una de sus manos el estuche de un teléfono celular, lo que hace presumir que fue víctima de un robo. Alrededor el Cicpc colectó unas siete conchas de proyectil.
Jesús Fuentes, vecino de Capuchinos dijo que estaba en su vivienda cuando escuchó las detonaciones. Tanto él como otros residentes aseguraron que la víctima no era de la zona.
Fuentes indicó que en esa dirección se producen robos a toda hora del día, mientras que los efectivos de la Guardia Nacional se hacen de la vista gorda. “No sé qué vamos a hacer. Estamos en un país donde nos tienen a los venezolanos de burla. Nadie se salva de esta delincuencia”, comentó.
