Socorristas laboran en los restos de un edificio que se desplomó el sábado en la noche en Medellín, Colombia, el domingo 13 de octubre de 2013. (Foto AP/Luis Benavides)
MEDELLIN. Ante el inminente colapso de una edificación aledaña, una comisión técnica recomendó el lunes continuar con las labores de búsqueda, sin el uso de maquinaria pesada, de las 11 personas atrapadas tras el desplome de un edificio en el noroeste de Medellín.
La torre seis del conjunto residencial «Space» se vino abajo hacia las 20:40 de la noche del sábado en el exclusivo barrio de El Poblado de Medellín, segunda ciudad en importancia de Colombia y a 250 kilómetros al noroeste de Bogotá. Ahora, la torre cinco amenaza con desplomarse también.
«Hay un riesgo inminente…. la torre cinco puede colapsar ya o en una semana, porque hay dos columnas fracturadas. Eso no da garantías para hacer un rescate», advirtió en la jornada ante reporteros la alcaldesa encargada, Claudia Restrepo.
Sin embargo, sostuvo la funcionaria, las autoridades de socorro tienen la voluntad de continuar con el rescate, para lo cual el comité técnico sugirió «combinar acciones manuales con acciones técnicas y el acompañamiento de algunas cámaras (de video) que permitan la identificación» de las víctimas bajo los escombros.
Hasta el momento, las unidades rescatistas han avistado dos cadáveres, pero «ningún cuerpo ha sido extraído o recuperado», dijo en diálogo telefónico Jaime Enrique Gómez, funcionario del Departamento Administrativo para la Gestión del Riesgo (Dagred).
Santiago Pérez, director del Dagred, indicó que desde el viernes se ordenó la evacuación de la torre de 22 pisos, luego de que el Dagred evaluara las denuncias de los residentes sobre grietas en los muros. «Había una columna en el sótano de la edificación con una ‘falla a compresión’ o serios compromisos estructurales».
Los residentes atendieron de inmediato la recomendación del Dagred, pese a que la constructora Lérida CDO comunicó que «esa falla no revestía mayor riesgo, que era una falla normal… Pensaban que no era necesario el desalojo», sostuvo Pérez en entrevista con The Associated Press.
La Fiscalía de Medellín anunció en la jornada la conformación de un equipo especializado para recopilar indicios de una eventual responsabilidad penal de la constructora en el siniestro del edificio, pero supeditó el inicio formal de la investigación a cualquier denuncia radicada por los afectados.
Las otras cinco torres del conjunto residencial, cuya construcción inició hace seis años, también fueron evacuadas luego del siniestro. Este lunes, la alcaldesa Restrepo autorizó el salvamento de enseres que reposan en las edificaciones uno, dos y tres.
La torre que se cayó tenía unos 54 apartamentos, y las pérdidas superarían los 12.000 millones de pesos (unos 6,4 millones de dólares).
Los desaparecidos son nueve obreros que estaban trabajando en el interior de la torre, un vigilante y un residente, sostuvo en la víspera la Alcaldía de Medellín en un comunicado de prensa. El residente fue identificado como Juan Esteban Cantor, quien, según Gómez, había llegado por casualidad a un estacionamiento de la torre seis. Una persona que lo acompañaba sobrevivió de milagro.
La noche del desastre, Ubeimar Contreras, el vigilante que quedó atrapado, sumaba apenas dos jornadas custodiando el edificio.
Luis Benavides / AP