El presidente, Nicolás Maduro, envió hoy un saludo al papa Francisco, del que destacó su «tremenda lucha contra la corrupción», un día después de que el líder opositor Henrique Capriles anunciara que será recibido en audiencia privada por el pontífice.
«Este es el papa que viene cuestionando el sistema neoliberal que lo privatiza todo, el modelo de los privilegios, y que viene emprendiendo tremenda lucha contra la corrupción», dijo Maduro durante un acto de Gobierno en Caracas.
El presidente recordó que en junio pasado fue recibido por el papa «como jefe de Estado, como presidente de la república» y comentó que el religioso le dio un abrazo y su bendición.
«Un saludo desde aquí al papa Francisco», dijo Maduro que ha pedido poderes especiales para legislar contra la corrupción a través de una Ley Habilitante y espera por la aprobación del Parlamento.
Tras el saludo, el gobernante le recordó al máximo representante de la iglesia católica lo conversado sobre José Gregorio Hernández, conocido en el país como «el santo de los pobres».
«Yo tengo una corazonada, que más temprano que tarde José Gregorio Hernández, el santo de los pobres, el santo del pueblo deVenezuela será canonizado por el Vaticano», dijo.
Maduro se reunió con el papa el 17 de junio por espacio de 20 minutos en un encuentro en el que abordaron la situación política deVenezuela y otros temas de la agenda internacional.
Capriles, por su parte, informó ayer que el papa Francisco aceptó recibirlo en una audiencia privada, para lo cual viajará al Vaticano en una fecha que dijo que ya ha fijado, pero que no reveló.
«Agradecemos enormemente la respuesta positiva de su santidad el papa Francisco; en las próximas semanas vamos a viajar a Roma (…) para una audiencia privada a la que llevaremos el mensaje de millones de venezolanos que quieren que el país pueda encontrarse», dijo en su programa semanal de televisión por internet.
Capriles pidió la audiencia el pasado 29 de julio y ese día manifestó a los periodistas que lo había hecho porque creía en el papel de la Iglesia Católica «como mediadora» frente a la situación de crisis política generada tras las elecciones presidenciales del 14 de abril.
Esos comicios, que decidieron el período presidencial 2013-2019, fueron ganados por Nicolás Maduro, a quien Capriles no reconoce como gobernante y lo acusa de haber cosechado un triunfo fraudulento.EFE