La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) llamó este martes a «enfrentar los embates» de los gobiernos de países como Venezuela, Nicaragua, Bolivia y Ecuador que intentan coaccionar a su prensa y debilitar el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, y condenó al asesinato de 14 periodistas en Latinoamérica.
Al finalizar su 69ª Asamblea General en Denver (Colorado, noroeste de Estados Unidos), la SIP insistió en la necesidad «de enfrentar los embates de los gobiernos de Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Venezuela (…) en su empeño por debilitar el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, en particular la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la cual es blanco de ataques permanentes».
El organismo condenó también el asesinato de 14 periodistas durante el último semestre, tres de ellos en México, dos en Brasil, Colombia, Guatemala y Haití respectivamente, y otros tres en Ecuador, Honduras y Paraguay. Esta es una de las cifras más altas de los últimos 20 años.
La organización también fustigó «el acaparamiento de medios de comunicación por parte de gobiernos autócratas» y la aprobación de la Ley Orgánica de Comunicación en Ecuador, que a su juicio «sirven para controlar y censurar los contenidos de los medios».
La SIP rechazó además la prescripción de 17 casos de asesinatos de periodistas (cinco en Colombia y 12 en México) por considerar que la impunidad y la acción de poderes judiciales débiles o sometidos son los motores generadores de la violencia.
Fuertes críticas a Estados Unidos
El organismo, que convocó entre el 18 y 22 de octubre a unos 300 editores y periodistas, fue particularmente duro con la situación en Estados Unidos.
Entre los mayores problemas de la región, la SIP incluyó la confiscación secreta de archivos de llamadas a reporteros de la agencia de noticias The Associated Press (AP) por parte del Departamento de Justicia de Estados Unidos.
«La SIP compartió la preocupación de organizaciones estadounidenses afines sobre el rumbo de la libertad de prensa en este país, sacudido por las revelaciones de espionaje contra periodistas e individuos», dijo la organización en su resolución final citando al presidente de AP, Gary Pruitt, quien expresó ante la asamblea cómo el temor a la vigilancia gubernamental ha generado autocensura entre algunas de sus fuentes.
La organización insistió además en que el Congreso estadounidense «sigue mostrando resistencia a tramitar una ley de protección a la reserva de la fuente que evite el encarcelamiento de periodistas».
«Coacción económica» que afecta la libertad
La SIP dijo que «observa con preocupación el acceso limitado a la información pública, un escollo para el trabajo periodístico en países como Ecuador, Honduras, El Salvador, Panamá, Uruguay y Venezuela, entre otros, mientras tanto en algunos países se carece de leyes de acceso a la información e impera una cultura gubernamental de secreto».
La organización citó también como ejemplo a los presidentes y funcionarios públicos de Argentina, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Panamá y Venezuela, que según los reportes de los representantes de estos países se niegan a ofrecer entrevistas o conferencias de prensa.
«La libertad de prensa también se vio afectada por la coacción económica en diversas formas, como la adquisición masiva de medios de comunicación por parte de los gobiernos, ya sea directamente o a través de personas afines a los mismos en Nicaragua, Venezuela, Bolivia y Argentina, para convertirlos no en medios de función pública sino en herramientas de propaganda partidista e ideológica», concluyó el organismo.
Sobre Venezuela, apuntó que «la discriminación oficial llega a la no autorización de divisas para la importación de insumos que no se fabrican en el país, como el papel».
AFP