Venezuela vive una de sus peores crisis económica y financiera de los últimos quince años y eso a pesar de los elevados precios del petróleo. Los principales síntomas son: caída de la producción y de la renta petrolera, caída de las reservas internacionales, inflación galopante del 52 %, crecimiento de la deuda y y del control de cambio de divisas.
El gobernador de Miranda y líder opositor, Henrique Capriles, con documentos oficiales en mano, alertó de una caída de las reservas líquidas a 1.398 millones de dólares que alcanzan sólo para un mes de importaciones. Al mes de octubre las reservas internacionales globales se situaron en 21.506 millones de dólaresde las cuales la mayor parte la constituye el oro guardado en el Banco Central de Venezuela (BCV).
Capriles señaló que las reservas internacionales habían sufrido una merma de 8.000 millones en lo que va de año. «El gobierno de Maduro está destruyendo la economía nacional. Ya está negociando unos 3.000 millones de dólares con la banca de inversión extranjera para pagar la deuda que han contraído importadores nacionales». También denunció que el BCV está negociando con Goldman Sachs la venta de 1.450.000 onzas de sus reservas de oro al precio actual de 1.860 millones de dólares. Además, señaló que el gobierno mantiene una deuda con las aerolíneas extranjeras desde 2011 de 2.356 millones de dólares.
Para explicar lo que ocurre con la venta de oro, el economista Alexander Guerrero dice que por cada onza de oro que vende el BCV el país pierde 126 dólares. «Se está vendiendo un 15% por debajo del valor que adquirió el oro (se revalorizó a 1.530 y ahora cuesta 1.380 dólares la onza». Guerrero sostiene que la renta petrolera ha caído y el flujo de caja de Petróleos de Venezuela (PDVSA) ahora es negativo, debido a que los acuerdos contraídos con China, Cuba y Petrocaribe son costosos para la República y eso impacta en las reservas internacionales. «El control de cambio es el culpable de que hayan caído las reservas».
Petróleo de Estados Unidos
Actualmente la renta petrolera oscila entre 46.000 y 56.000 millones de dólares anuales. Si antes la producción era de 3 millones de barriles diarios ahora es de 2,3 y 2,4 millones de barriles diarios. A eso hay que restarle la paralización de la Refinería de «El Palito» por los continuos incendios y siniestros ocurridos que han obligado a importar más de cien mil barriles diarios de gasolina y gasóleo de EEUU, ya que en Venezuela aunque hay petróleo, no hay refinerías.
Unos 800.000 barriles diarios se destinan a los convenios con Cuba, China y Petrocaribe que no aportan dinero. De todos los clientes de PDVSA sólo Estados Unidos paga en efectivo la factura petrolera de unos 800.000 barriles diarios. «Por eso es que el Gobierno de Maduro se ha quedado sin dinero. El flujo de caja de PDVSA es mínimo. El drama de Venezuela es que ya no produce como antes. Podemos decir que el país está en la miseria», dice Guerrero.
El economista afirma que la ofensiva económica de Maduro con sus llamados al saqueo y vaciar las tiendas de electrodomésticos para que la gente consiga un televisor barato es para que se distraigan porque el«problema financiero es muy grave». Y lo dibuja de esta manera: «en el 2014 Venezuela se acerca a una quiebra financiera o a un terremoto financiero que la colocará en el umbral de la hiperinflación».
¿Cómo en Zimbabue con las medidas de Mugabe?, preguntamos. «Maduro va detrás de Mugabe. El mantra de Maduro es Mugabe», responde. En 2007 el dictador africano impuso medidas como control de precios y rebajas obligadas. Los comercios fueron arrasados. Guerrero habla de la deuda pública. La deuda documentada en bonos al portador es de 83.000 millones de dólares que vence hasta el años 2025. «El 17 de noviembre se vencen 1.300 millones de dólares de bonos de PDVSA y la estatal petrolera anda buscando dinero, mejor dicho, raspando la olla para pagar».
Ludmila Vinogradoff /ABC.es