El médico no está, pero puede verle.
Los robots de presencia remota permiten a los médicos «teledirigirse» por su cuenta a hospitales para diagnosticar a los pacientes y ofrecer asesoría médica en emergencias.
Un número creciente de hospitales en California y otros estados utilizan los robots de telepresencia para ampliar el acceso a los especialistas médicos, principalmente en zonas rurales en la que no abundan los galenos.
Estas máquinas móviles de videoconferencia sobre ruedas suelen medir 1,5 metros (5 pies), con grandes pantallas que proyectan el rostro del doctor. Cuentan con cámaras, micrófonos y altavoces que permiten a los pacientes verse y hablarse.
Dignity Health, que opera hospitales en Arizona, California y Nevada, comenzó a usar las máquinas de telemedicina hace cinco años para diagnosticar a los pacientes sospechosos de sufrir apoplejías, casos en que los minutos son cruciales para evitar graves daños cerebrales.
La entidad con sede en San Francisco usa ahora los robots de telemedicina en las salas de emergencias y las unidades de cuidados intensivos en unos 200 hospitales de California, lo que les da acceso a especialistas en áreas como la neurología, cardiología, neonatología, pediatría y salud mental.
«Sin importar dónde se encuentre el paciente, podemos estar a su lado en unos minutos», dijo el doctor Alan Shatzel, director médico de la red Mercy Telehealth Network. «Literalmente, comprimimos el tiempo y el espacio con esta tecnología. La distancia no afecta ya la posibilidad de que una persona tenga acceso al mejor cuidado médico posible».
Dignity Health es una de varias cadenas de hospitales que comenzaron a usar recientemente la tecnología RP-VITA, desarrollada conjuntamente por InTouch Health y iRobot Corp. Fue aprobada para los hospitales por la Administración de Drogas y Alimentos de Estados Unidos.
«Los hospitales usan ahora este tipo de tecnología a fin de utilizar al máximo sus especialistas, incluso mejor y de forma más eficiente», dijo el doctor Yulun Wang, director general de InTouch Health, con sede en Santa Bárbara.
Casi 1.000 hospitales en Estados Unidos y el extranjero han instalado aparatos InTouch de telemedicina, incluyendo unos 50 robots RP-VITA lanzados en mayo, según los funcionarios de la empresa. La forma alquila los RP-VITA por unos 5.000 dólares al mes.
Cuando un médico es necesario en un hospital remoto, puede conectarse en el RP-VITA de ese lugar mediante un computador, un laptop o un iPad.
En la habitación del hospital, el doctor puede ver, oír y hablar con el paciente y tiene acceso a la información clínica e imágenes médicas. El médico no puede tocar al paciente, pero siempre hay una enfermera o un ayudante médico en el lugar para ayudar.
AP