La creación del organismo que emite las cédulas de identidad y los pasaportes venezolanos fue responsabilidad de José Lavandero García, vicerrector de la Universidad de Ciencias Informáticas de Cuba, quien fue subordinado de Ramiro Valdés, jefe de los servicios de inteligencia de la isla, así lo reseño Adriana Rivera en El Nacional.
El organismo que emite las cédulas de identidad y los pasaportes a los venezolanos tiene un padre cubano: José Lavandero García. Ese hombre, de 69 años de edad, es una de las figuras más importantes de la misión de Cuba en Venezuela. Su aprobación fue indispensable para el diseño y la puesta en marcha del Proyecto Identidad a partir del cual el gobierno del fallecido Hugo Chávez constituyó el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería, Saime, que fue concebido no sólo para mejorar la atención de la ciudadanía sino como una herramienta para apuntalar la base de apoyo electoral del gobernante y su partido político.
Lavandero es vicerrector de la Universidad de Ciencias Informáticas de La Habana, UCI, que depende del Ministerio de Informática y Comunicaciones que estuvo bajo la conducción del general Ramiro Valdés hasta 2012. El oficial –quien ahora ocupa la Vicepresidencia del Consejo de Ministros y del Consejo de Estado de Cuba– es considerado el artífice de los sistemas de inteligencia política de la isla conocidos como G-2 y era uno de los jefes de Lavandero para el momento en que el funcionario trabajaba en el diseño del Saime. El vicerrector revisó cinco borradores y dio el visto bueno al proyecto definitivo para la constitución del organismo. La última versión, del 4 de agosto de 2006, tiene un casillero que corrobora su nivel de responsabilidad: “Aprobado por José Lavandero”.
El proyecto del vicerrector no dejó escapar detalle alguno. Tiene 218 páginas encabezadas por el logo de Albet Ingeniería y Sistemas, compañía que vende los programas informáticos elaborados por los estudiantes de la UCI y la cual se ha convertido en un contratista privilegiado del gobierno venezolano en el área del software. El documento señala de manera explícita que el nuevo Saime –que reemplazó a la extinta Oficina Nacional de Identificación y Extranjería– debía contribuir a la consolidación de la denominada “Nueva Estrategia Electoral”, un objetivo trazado por Chávez en 2005 cuando formuló el plan de la “Nueva Etapa de la Revolución Bolivariana”. “Para nosotros era importante incluir a nuestra base de apoyo, a los sectores excluidos a los que se les garantizó el acceso a las cédulas”, reconoce José Javier Morales, quien presidió la Onidex y fungió como gerente de la iniciativa para crear el Saime. El vocero no oculta la visión política. “Esta es una revolución de los más pobres y había que garantizar su derecho a participar”, añade el ahora diputado del PSUV a la Asamblea Nacional por Trujillo, quien insiste en que el vicerrector cubano se limitó a tener un papel de asesor.
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