Entre la tarde del pasado viernes y la mañana de este domingo, fueron llevados a la morgue de Bello Monte 12 cadáveres, provenientes de diferentes puntos del Distrito Capital y por diferentes causas de muertes.
Entre las víctimas estaba Joel Paraco, de 40 años de edad, quien recibió cuatro tiros por la espalda en un lugar impreciso del municipio Sucre. Sus deudos, dijeron que el hombre laboraba como mototaxista en una cooperativa ubicada en la Redoma de Petare.
La última vez que lo vieron con vida fue el pasado viernes, a eso de las 7:00 de la noche. Como no llegó a su casa, comenzaron buscarlos por diferentes centros de salud y estaciones policiales. Finalmente fueron a una dependencia del CICPC, donde los remitieron a la medicatura forense.
En la morgue les informaron que el cuerpo fue llevado procedente del hospital Domingo Luciani, donde fue ingresado con 4 heridas de bala en la espalda que recibió cuando se encontraba por el barrio Mesuca de Petare. Le robaron su moto Empire. La víctina dejó cuatro hijos y vivía en el barrio Maca de la misma localidad.
Triple asesinato
Según fuentes policiales, en un presunto ajuste de cuentas mataron a tres hombres, a eso de las 3:00 de la madruga de ayer domingo en el sector El Torres de Petare.
El trío ingresó con múltiples disparos, al Hospital Ana Francisca Pérez de León, donde a dos los identificaron como: Eugenio de Jesús Arcia Torres, de 23 años de edad; Jhon Ansoni Torres Ramos de 26 años de edad, y el tercero no portaba documentación alguna.
También en Petare, en el sector La 37 de Mesuca, a eso de las 12:45 de la madrugada, en una riña recibió un tiro en la cabeza, Maikel Serrano Romero, de 19 años de edad, quien fue trasladado al Hospital Pérez de León, pero falleció una hora después.
En otro hecho de sangre murió Winder Canelón, de 23 años de edad, quien residía con su abuela y otros hermanos, en un sector del barrio Primero de Mayo, en El cementerio.
La noche del sábado estaba en una fiesta que organizaron en la vivienda donde habitaba, pero a las 11:00 de la noche, recibió una llamada telefónica y salió. Más tarde le dijeron a su familia que lo habían matado de varios tiros en el barrio Los Sin Techos.
Al joven le despojaron de un teléfono celular, de los sencillos, y su billetera. Deja un hijo de un año de nacido. Laboraba como ayudante de latonería de autos, en un talle de un tío y era el mayor de cuatro hermanos
AA
