Las amenazas de muerte que había recibido Judith Ahumedo Camargo, por atestiguar en contra del que mató de su hermano se cumplieron, cuando fue asesinada de múltiples impactos de bala en el barrio San Blas de Petare, durante la noche del pasado martes
Caracas, (Especial /AA). Las amenazas de muerte que había recibido Judith Ahumedo Camargo, de 28 años de edad, por atestiguar en contra del asesino de su hermano se cumplieron la tarde de este martes. La joven fue acribillada a tiros por delincuentes que la siguieron hasta una casa donde trataba de resguardarse de los disparos, en el barrio San Blas de Petare.
En el interior de la vivienda hubo otros dos heridos de bala, uno de ellos habitante de la casa que recibió un disparo en una pierna. Judith Ahumedo corrió desesperada hacia ese lugar donde se metió al hallar la puerta abierta.
La mujer estaba con su hijo de 7 años de edad, cuando los delincuentes la acorralaron. Pese a que intentó esconderse en la casa vecina, hasta allá llegó el hombre que sin contemplación le disparó. Su hijo resultó ileso.
El crimen ocurrió en el sector El Chorrito del barrio San Blas, en Petare. La mujer fue trasladada al hospital Domingo Luciani, en El Llanito, donde murió.
La tragedia que persigue a la familia comenzó el 13 de mayo del año 2007, cuando Judith Ahumedo presenció el asesinato de su hermano César Augusto Ahumedo. Ese día ella llevaba a su hijo que para entonces tenía dos años. Un hombre identificado como Jean Pablo Beltrán García, disparó contra el muchacho y aunque trató de impedirlo no pudo.
Tres años más tarde el delincuente fue capturado. El Tribunal 8vo de Ejecución le dictó sentencia de 20 años de prisión por el asesinato. Las acusaciones de la joven fueron claves para que se hiciera justicia, pero aún durante el proceso el individuo le mandaba recados asegurándole que si señala la mataría.
Tras la sentencia condenatoria, Beltrán fue enviado a la PGV en San Juan de Los Morros, de donde se fugó meses después. Hace aproximadamente una semana fue detenido por funcionarios de la Policía del Municipio Plaza, en Guarenas, pero presuntamente desde la cárcel contactó a los asesinos que le quitaron la vida a Judith Ahumedo.
La joven era ama de casa y tenía dos hijos, el mayor de 11 años y el segundo de 7. Sus deudos temen por la vida del resto de los miembros de la familia, pues el homicida ya ha asesinado a dos de los cinco hermanos.