Esta Constitución, derogada por la Constitución Bolivariana de 1999, contuvo numerosas innovaciones de forma y de fondo que determinaron un cambio importante en nuestro sistema constitucional
En tiempos en que la actual Carta Magna Nacional de 1999, sufre severas violaciones al ser inconstitucionalmente interpretada y utilizada por los gobernantes de turno, bien vale recordar las leyes establecidas en la Constitución más duradera de nuestra historia, la de 1961.
Aprobada luego de un largo proceso por el Congreso Nacional elegido en 1958, la Constitución del 23 de enero de 1961 recoge los principios de soberanía popular, la participación de todos los ciudadanos en la elección de los gobernantes y la alternabilidad en el poder. Una Constitución rígida que buscaba consolidar las instituciones del Estado y regular su relación con los ciudadanos.
La Constitución de 1961 fue derogada en su totalidad en el gobierno de Hugo Chávez, que la denominó como “la moribunda” al tomar posesión del cargo de presidente. La actual Constitución se obtuvo por varias vías: la transformación de las redes informales existentes en los años ´80 y gran parte de los ´90, en redes formales e institucionalizadas, la creación e institucionalización de nuevas redes nacionales de carácter formal y electrónicas junto con la continuidad y reforzamiento de las redes informales y sumergidas pre-existentes y el surgimiento de alianzas, comunicación e intercambio con redes internacionales a través de medios electrónicos.
Finalmente, la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999 fue publicada en la Gaceta Oficial Nro. 5453 del 24 de marzo de 2000. La historia constitucional venezolana es extraordinariamente agitada ya que es posible constatar un total de 25 textos constitucionales (1811, 1819, 1821, 1830, 1857, 1858, 1864, 1874, 1881, 1891, 1893, 1901, 1904, 1909, 1914, 1922, 1925, 1928, 1929, 1931, 1936, 1945, 1947, 1953, 1961 y 1999).
Evidentemente, un buen número de tales textos no constituyen otra cosa que una mera cobertura jurídica con apariencia de constitución para justificar el poder de caudillos o dictadores militares.
La tradición constitucional venezolana ha hecho que, con frecuencia, se revista como nueva constitución lo que materialmente no ha sido más que una puntual modificación de algunos preceptos constitucionales.
La Constitución de 15 de diciembre de 1999, hoy vigente, ha venido a suceder a aquella otra de 23 de enero de 1961, que fuera elaborada con el acuerdo y respaldo de los tres principales partidos (Acción Democrática, COPEI y Unión Republicana Democrática) que apoyaron a la Junta de Gobierno, implantada tras el levantamiento cívico-militar que tuvo lugar el 23 de enero de 1958 contra el gobierno del general Marcos Pérez Jiménez y logró dotar al país de un régimen basado en los principios de la democracia constitucional, liberal y representativa.
La Bolivariana
Impulsada por Hugo Chávez y aprobada en 1999 con un amplio apoyo, (71,78 por ciento), es conocida popularmente como Constitución Bolivariana. Fue la primera constitución aprobada mediante el sistema de referéndum. Es la Carta Magna vigente y recibió un gran respaldo de diversos sectores, incluyendo a actores de la Constitución de Venezuela de 1961, como Luis Miquilena, pero también fue rechazada por los partidos políticos tradicionales.
Los venezolanos, fueron convocados a un Referéndum Consultivo el 25 de abril de 1999 (el primero realizado para este fin en la historia de Venezuela) para que decidiesen si aprobaban o no la propuesta presidencial de convocar una Asamblea Constituyente (cuyos integrantes serian electos por voto popular después) para refundar el estado venezolano dotándolo con una nueva Carta Magna.
La propuesta fue aprobada y los partidarios del gobierno obtuvieron la mayoría de los asambleistas de la Constituyente, siendo esta constitución redactada en aproximadamente seis meses, tiempo después del cual el texto aprobado por la Asamblea fue sometido a consulta popular.
Entre las principales características cabe destacar que dicha Constitución modificó el nombre del país, pasándose a denominar República Bolivariana de Venezuela. Se pasó de Gobierno representativo a participativo, se otorgó mayores poderes al Presidente, reapareció el cargo de Vicepresidente, desapareció el Senado, se estableció que la totalidad de las acciones de Petróleos de Venezuela S.A. pertenecen al Estado, se inició la Quinta República, aumentó del periodo presidencial de cinco a seis años, se establece la creación de la Policía Nacional y el aumento de los derechos fundamentales de los indígenas venezolanos.
Edda Pujadas | @epujadas