Con los pipotes “boca abajo” permanecen los habitantes de esta parroquia por la falta del preciado líquido
Quince días sin servicio de agua potable y 22 con la basura en la calle, llevan vecinos de la parroquia Las Brisas de Charallave, municipio Cristóbal Rojas.
Marianela Hernández, afectada, indicó que ya están cansados de pasar penurias por la falta del preciado líquido. “Esta situación se ha hecho costumbre y nadie nos da respuesta”, acotó.
Indicó la vecina que con la problemática están afectadas las familias que habitan en los sectores: zona 4 parte alta, escalera del “Chino”, La Palomera, calle principal y La Cooperativa. Otro afectado con la falta del preciado líquido es el Centro Diagnóstico Integral de la comunidad.
“Somos más de tres mil habitantes que estamos pasando calamidades por no tener agua para cocinar los alimentos y para el aseo personal”, manifestó Cruz.
Sin recursos
Indicó Marianela Hernández, que el personal de la alcaldía del municipio Cristóbal Rojas, les informó la semana pasada que la bomba de agua del tanque se había dañado, y que además no tienen recursos para comprar el repuesto de la máquina.
Señaló Hernández, que le piden al alcalde de la entidad Humberto Marte, que los apoye con los camiones cisternas de la alcaldía, ya que no tienen como seguir pagando para llenar sus pipotes. “Hoy sacamos todos los envases para ver quién se compadece de nosotros y los llena; estamos desesperados”, dijo la mujer
Invadidos por la basura
Otra problemática planteada por los vecinos de la parroquia Las Brisas, fue la falla en recolección de los desechos sólidos, ya que según los habitantes tienen 22 días sin que los camiones de la Dirección de Servicios Públicos recojan la basura.
“Uno llama a la alcaldía y no le dan soluciones a las problemáticas que estamos padeciendo con los servicios básicos en Las Brisas”, dijo.
Señaló Hernández que se sienten olvidados por las autoridades. “Sin agua, con estos malos olores y la invasión de ratas, moscas y zancudos, ya no podemos estar dentro de nuestras casas”, finalizó diciendo la vecina.
MIP-TUY / Laura Purroy
lcpurroy@hotmail.com