El gobernador de Miranda y líder de la unidad nacional, Henrique Capriles, se pronunció este jueves sobre los últimos acontecimientos registrados en el país y quejaron como saldo lamentable 3 personas fallecidas, más de 30 heridos y un número representativo de detenidos. Dijo que decidió suspender la actividad que tenía prevista y la que presentaría su informe de gestión 2013 al pueblo, porque no había motivos para estar alegres.
“Hoy Venezuela amaneció con un ambiente pesado. Queremos enviar nuestras palabras de condolencia a los familiares de los que ayer fueron asesinados. Tengo mucho dolor, porque la muerte de un ser humano nos debe llamar a la reflexión. Ni la muerte ni la sangre son el camino para construir el país que queremos”.
Dijo que siempre condenará la violencia y a la vez sostuvo que el Gobierno no puede deslindarse de grupos irregulares armados financiados por el Ejecutivo.
“Que no venga ahora el Gobierno a querer jugar el papel de la caperucita roja, porque ellos saben que tienen grupos armados que reprimieron la manifestación de ayer a plomo. Siempre el Gobierno nos ha pedido que nos deslindemos de la violencia y nosotros no necesitamos que nos lo pidan para hacerlo. Es tiempo de que le preguntemos al Gobierno ¿Cuándo va a desarmar los grupos anárquicos, que salen a agredir estudiantes? Lo hemos advertido, la violencia pasa a ser una excusa, para intentar tapar la crisis. Para poner un ejemplo, en enero probablemente se registró el desabastecimiento y la inflación más alta de nuestra historia”.
Capriles sostuvo que la violencia es el arma de los que no tienen razón y precisó que “valiente es aquel que con las fuerzas de las ideas cambia el pensar de otros (…) Parece que no hemos aprendido, tenemos años en esto, las arrugas en el rostro no son de gratis, no podemos atornillar a un gobierno débil como este en el poder. La salida definitivamente no es violenta”.