El fallecido Bassil Alejandro Dacosta Frías acudió a la marcha convocada por el movimiento estudiantil acompañando a su primo Neiser Arellano, de 22 años, estudiante de Mercadeo de la universidad Alejandro Humboldt y quien recibió un disparo en una pierna
Bassil Alejandro Dacosta Frías murió defendiendo los ideales de un grupo de estudiantes que salió a las calles a protestar en contra de la violación de los derechos de los jóvenes detenidos en el estado Táchira. Fue una de las tres víctimas fatales en los escenarios de violencia en Caracas y que se repitieron en otros estados del país.
Dacosta no era estudiante universitario. Acudió a la marcha convocada por el movimiento estudiantil acompañando a su primo Neiser Arellano, de 22 años, estudiante de Mercadeo de la universidad Alejandro Humboldt y quien recibió un disparo en una pierna cuando durante la protesta hubo una confrontación.
Su tío, Juan Carlos Sierra, dijo que junto a Bassil y Neiser, estaba otro de sus sobrinos, Yorman Valero, de 22 años, estudiante de bachillerato por parasistemas en un instituto de Guatire, donde vive la familia. “Eran muy unidos porque compartían intereses. Los tres siempre estaban juntos, jugaban futbol y eran fanáticos del Deportivo Táchira”, dijo.
Los primos salieron a la movilización estudiantil sin el conocimiento de la familia. Estaban junto al grupo que salió desde Plaza Venezuela hacia la Fiscalía General de la República para exigir la libertad de los estudiantes detenidos.
De acuerdo a la versión de Yorman Valero, quien recibió un perdigonazo en el hombro derecho durante la refriega,
cuando avanzaban entre la avenida Universidad hacia la esquina Tracabordo, fueron atacados a tiros y con perdigones por un grupo de supuestos policías.
Entre estas personas, pudo identificar al pistolero que disparó contra su primo Bassil Dacosta. Era un hombre que vestía pantalón de jean, sweter y chaqueta negra. “Dijo que era moreno, de cierta estatura u corpulento, pero creemos que se veía así por el sweter”, contó Sierra.
Cuando los estudiantes se encontraron de frente con los pistoleros se produjeron varias detonaciones. Ellos avanzaban y retrocedían intermitentemente mientras algunos arrojaban piedras contra los uniformados que les disparaban con perdigones.
De acuerdo a su testimonio, con los primeros impactos de bala, Neiser Arellano fue herido de un tiro en la pierna, pero sus primos no se enteraron porque estaban en el grupo que encabezaba la movilización. “A Neiser se lo llevaron al hospital pero Yorman y Bassil no se dieron cuenta. Si ellos se hubieran enterado de que estaba herido se hubieran ido a llevarlo al hospital y no habría pasado esto”, expresó tu tío.
Cuando el presunto homicida iba de frente a los estudiantes disparando, Yorman y Bassil corrieron junto al resto de estudiante en sentido hacia la esquina de Miguelacho. De un momento a otro se quedaba sin balas y retrocedía para recargar, momento que aprovecharon los jóvenes para arrojarle piedras.
Ante esta situación, Bassil Dacosta trató de detener a su primo Yorman y le pidió que se retiraran porque estaban disparando, pero este no quiso, por lo que decidió quedarse para no dejarlo solo. En un instante impreciso, el pistolero volvió hacia ellos y nuevamente accionó su arma en varias ocasiones hiriendo al joven en la cabeza.
Su primo y sus compañeros, lo alzaron en la esquina de Tracabordo y corrieron con él en brazos para llevarlo a un hospital, pero unos metros antes de la esquina Monrroy en la avenida Universidad se quedaron sin fuerzas y lo dejaron reposar en el piso. “Yorman dice que no conseguían un carro o una moto para sacarlo de allí. Hasta que uno de ellos que era más corpulento lo cargó en sus hombros para avanzar un par de cuadras más, hasta donde encontraron un patrulla para llevarlo al hospital Vargas”, narró el tío de la víctima.
Cuando lo llevaban en la patrulla Bassil Dacosta estaba vivo. Su primo trató de taparle la herida en la cabeza para evitar que se desangrara, mientras él, en su agonía solo alcanzaba a mojarse los labios con saliva, según contaron sus familiares. En el hospital, los médicos le dijeron a Yorman que lo dejara en el suelo mientras buscaban una camilla, luego de 20 minutos fue ingresado a quirófano pero falleció.
Bassil Dacosta era carpintero y laboraba en un negocio de Guatire. Era el segundo de tres hermanos, futbolista y formaba parte de la barra del Deportivo Táchira, por lo que siempre se aventuraba en los viajes de la selección.
Su primo, Yorman Valero, es uno de los testigos claves para esclarecer el asesinato. Este miércoles rindió declaraciones en el Cicpc hasta la madrugada. Fue llevado para la reconstrucción de hechos en el sitio donde cayó su primo y con su testimonio se elaborara el retrato hablado del asesino.
A Neiser Arellano le dieron de alta en horas de la noche. Fue llevado a la clínica luis Razzetti de Bellas Artes, pero afortunadamente el disparo no le lesionó partes óseas en la pierna.
Testigo y víctima
Entre el grupo de estudiantes que ayudó a sacar a Bassil Dacosta del sitio donde cayó herido en la esquina de Tracabordo, estaba Roberto José Redman Orozco, de 31 años. El joven maratonista quien estaba haciendo un curso de piloto, fue la tercera víctima fatal de este 14F.
En su cuenta en twitter @escualidoreload, Redman dejó testimonio de sus últimas horas de lucha cuando participó en la marcha hacia la Fiscalía y tuvo, más tarde, que cargar a Bassil Dacosta quien iba herido de bala antes de morir. “hoy me pegaron una pedrada en la espalda, un cascazo por la nariz, trague bomba lacrimógena, cargue al chamo que falleció, y tú qué hiciste?”, colocó a las 6:25 de la tarde.
Minutos antes, a las 6:21pm escribió: “Me toco cargar al chamo que murió, hasta hace poco tenía su sangre en mi brazo, pero ya llegue a la casa”. Se presume que tras ese mensaje, una hora más tarde, volvió a las calles de Chacao para reseñar desde su cuenta la situación por las trancas y protestas que se registraban en ese municipio.
En la calle San Ignacio, cayó muerto con un disparo en la cabeza, cuando desde una moto negra tripulada por dos hombres pasaron haciendo una ráfaga de disparos contra las personas que protestaban en ese lugar. Hubo otros 5 heridos que fueron llevados a Salud Chacao.
Agilizaron autopsia
del líder de colectivos
El cadáver de Juan Montoya, de 40 años, funcionario de Policaracas y miembro de la organización que dirige a los colectivos que operan en el 23 de Enero, fue entregado este mismo miércoles. En la morgue de Bello Monte habilitaron a un patólogo para hacer la autopsia horas después de su ingreso.
Montoya cayó muerto cerca de la esquina Monrroy en la avenida Universidad. Fue el primer fallecido de los disturbios en las cercanías de la Fiscalía General de la República y según fuentes policiales, cayó a una cuadra del sitio donde hirieron de muerte a Bassil Dacosta.