El ministro de Petróleo de Venezuela, Rafael Ramírez, negó hoy que su país haya cambiado las condiciones de financiación de la alianza Petrocaribe, en respuesta a los reclamos de algunos países sobre una supuesta modificación en las reglas del juego.
«No hubo ninguna modificación, lo que hay es que estamos migrando hacia un esquema de crear un fondo que sostenga la deuda a largo plazo», aseguró Ramírez a periodistas.
Según el ministro, que preside además la estatal Petróleos de Venezuela, con el nuevo esquema se busca evitar que los países miembros de Petrocaribe «se endeuden a un nivel que no puedan cumplir sus pagos».
A su vez, denunció la existencia de una «campañita absurda contra Petrocaribe» por parte de sectores que no identificó y defendió al esquema, que suministra combustibles en condiciones favorables a países del Caribe y Centroamérica, como un «modelo de lo que debe ser la cooperación».
El ministro estimó la deuda de Petrocaribe en 1.000 millones de dólares y dijo que parte de esa cifra ha sido cancelada con alimentos.
El Gobierno de Honduras dijo recientemente que la iniciativa Petrocaribe ha dejado de ser atractiva para el país porque «se cambiaron la reglas del juego por parte del Gobierno de Venezuela», pues «se redujeron los plazos y aumentaron la tasa de interés» sobre los combustibles.
Honduras se sumó en sus reparos a Guatemala, que el año pasado retiró su interés de incorporarse como miembro pleno a Petrocaribe, debido a que las condiciones impuestas por Venezuela no le convenían al país.
Petrocaribe surgió como un mecanismo de integración energética en 2005 y prevé la entrega de petróleo y derivados por parte de Venezuela en condiciones financieras ventajosas a los socios integrantes del organismo.
Sus miembros son Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Nicaragua, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Surinam y Venezuela. EFE