El presidente Barack Obama necesitaba buenas noticias y las recibió el viernes tras su decepcionante desempeño en el debate frente a su contrincante republicano Mitt Romney: la tasa de desempleo bajó a su menor nivel desde la llegada del mandatario a la Casa Blanca.
Por su parte, Romney manifestó que Obama no ha hecho lo suficiente para generar empleos.
Las estadísticas que difundió el viernes el Departamento de Trabajo, de una disminución del desempleo a 7,8% en septiembre tras la creación en el mismo mes de 114.000 plazas de trabajo, apoyan con evidencias la afirmación de Obama de que sus políticas económicas están funcionando.
Romney reviró y dijo que Estados Unidos no puede permitirse otros cuatro años con el presidente en las riendas del país y afirmó que el propiciaría una recuperación con políticas para la creación de trabajos y elevación de los ingresos que favorecerían el crecimiento.
«Una verdadera recuperación no se parecería a esto», manifestó el ex gobernador de Massachusetts en un comunicado que hizo público menos de una hora después de la difusión de las cifras relacionadas con el desempleo.
Romney puso de ejemplo a los millones de personas que continúan teniendo dificultades para encontrar un trabajo, que viven en la pobreza y que dependen de los bonos de comida para alimentar a sus familias.
AP