«En horas de la noche grupos armados y violentos arremetieron contra la propiedad privada y destrozaron algunos locales comerciales», dijo el gobernador del estado Aragua (centro), Tareck El Aissami, aunque más tarde informó sobre la vuelta a la «normalidad» en la entidad.
El Ministerio Público confirmó la muerte en Aragua de una persona tras recibir un disparo en este incidente, sin aclarar si ocurrió al margen de las protestas o si fue un caso de delincuencia común.
Por su parte, el presidente de la patronal empresarial Fedecámaras en el estado Táchira (occidente), Daniel Aguilar, lamentó que a pesar de la militarización decretada en esa región por el presidente venezolano Nicolás Maduro, «en las calles estén algunas personas desconocidas saqueando negocios y empresas».
También en el estado Zulia (occidente), en horas de la tarde el director de la policía estatal de Maracaibo, José Alcalá, informó que 23 personas fueron detenidas por intentar robar en ocho locales comerciales.
«No sólo pretendían llevarse los artículos (de los comercios), sino que intentaron quemar unas patrullas pertenecientes al Cuerpo de Policía del Zulia», indicó Alcalá.
Al menos 14 muertos, más de 140 heridos y 45 detenidos han dejado las manifestaciones en varios estados de Venezuela desde que comenzaron los disturbios a inicios de febrero en la ciudad de San Cristóbal (occidente), cuando estudiantes protestaron contra la inseguridad tras el intento de violación y robo de una universitaria.
Maduro ha denunciado que estas manifestaciones responden a un «golpe de Estado en desarrollo», que derivó en la detención el pasado martes del dirigente opositor Leopoldo López, uno de los promotores de las protestas y detenido por instigar a la violencia.
El mandatario asegura que en el país quedan solo «focos de violencia», pese a que se siguen reportando incidentes en algunas ciudades.
AFP