El presidente de la Asociación de Usuarios de la Zona Libre de Colón, Germán Gómez, tildó hoy de injusto que el conflicto diplomático entre Venezuela y Panamá afecte el proceso de revisión y pago de la deuda millonaria que mantienen empresarios venezolanos con sus pares panameños.
El canciller de Venezuela, Elías Jaua, anunció hoy la suspensión de la revisión de la deuda de importadores venezolanos con la panameña Zona Libre de Colón, un día después de que Caracas decidió de forma unilateral romper las relaciones diplomáticas y congelar las comerciales aduciendo injerencia panameña en sus asuntos internos.
«Las deudas son obligaciones de tipo comercial privado (…) son empresas de la Zona Libre de Colón que le han vendido a empresarios en Venezuela, entonces no creemos justo que esa decisión unilateral del Gobierno venezolano (de romper las relaciones diplomáticas) deba afectar a las empresas de la Zona Libre», declaró Gómez a Efe.
La deuda deriva del hecho de que los empresarios venezolanos deben esperar a que el Estado les otorgue los dólares para pagar sus cuentas en el exterior en el marco del complicado control de cambios que rige en Venezuela desde hace más de una década.
Gómez denegó precisar la cifra de la deuda porque aún se debe precisar «a quién se le debe, cuánto y por qué», y dijo que la cifra de unos 1.200 millones de dólares que se ha manejado públicamente es una de las tantas que analiza una comisión bilateral para tratar el asunto conformada el año pasado, por acuerdo de los gobiernos de Panamá y Venezuela.
«Decir una cifra es realmente especular (…) todo se volvió un tema sumamente especulativo y llegar a determinar una cifra cierta es sumamente delicado», declaró el presidente de la Asociación de Usuarios de la Zona Libre de Colón, que alberga alrededor de 3.000 empresas de acuerdo con datos de ese gremio.
Gómez aseveró que las ventas de la Zona Libre de Colón a Venezuela ha llegado a representar «entre el 30 % y el 35 %» de sus transacciones aunque, añadió sin precisar cifras, ese volumen ha bajado considerablemente debido a las dudas sobre la capacidad de pago de los importadores venezolanos.
Al anunciar este jueves la suspensión de la revisión de la deuda comercial «hasta tanto en Panamá no haya un Gobierno serio», el canciller Jaua aseveró que durante ese proceso de registro se encontró «todo tipo de acciones fraudulentas tanto de comerciantes panameños como de venezolanos».
«Hemos estado lidiando con un pañuelo en la nariz, revisando esa podredumbre en que se ha convertido esa relación comercial», expresó el canciller deVenezuela.
Gómez conminó a las autoridades venezolanas a presentar «las pruebas» que tengan de esas supuestas irregularidades, y resaltó que las empresas de la Zona Libre «venden productos» y la «responsabilidad de cómo la mercancía es transportada o cómo ingresa a Venezuela es del comprador».
«El Gobierno venezolano puede hacer las declaraciones que a bien tenga, la deuda está allí y hay que pagarla», añadió Gómez.
Por su parte, un portavoz de la estatal Administración de la Zona Libre de Colón dijo hoy a Efe que por ahora no se pronunciarán sobre el anuncio venezolano que afecta el pago de la deuda.
Para tratar el tema de la Zona Libre de Colón, Venezuela y Panamá conformaron una comisión técnica el año pasado, después de una reunión de los presidentes venezolano, Nicolás Maduro, y panameño, Ricardo Martinelli, celebrada en julio de 2013 en Caracas.
El expresidente de la Asociación de Usuarios de la Zona Libre de Colón Severo Souza dijo este jueves que hasta ahora Venezuela no ha pagado ni un céntimo de la deuda.
La Zona Libre de Colón es considerada la segunda más importante del mundo, después de Hong Kong, y representa alrededor del 8 % del producto interno bruto (PIB) de Panamá. EFE