Robo de vehículos, asaltos a mano armada y arrebatones son algunos de los sucesos más recurrentes en la transitada calle zamorana, que da con la parte trasera de las oficinas de la Alcaldía de esta misma jurisdicción
Hechos delictivos se vienen reportando en las últimas semanas en la calle 9 de diciembre de la ciudad mirandina de Guatire, ocasionando temor y gran inquietud entre las personas que a diario circulan en la zona, en donde funcionan desde colegios y hasta entidades bancarias.
Robo de vehículos, asaltos a mano armada y arrebatones son algunos de los sucesos más recurrentes en la transitada calle zamorana, que da con la parte trasera de las oficinas de la Alcaldía y que, si bien es cierto que cuenta con patrullaje, este no parece ser suficiente ante la inclemente acción del hampa que tiene de sopita a comerciantes y ciudadanos que van hacia los cajeros.
Las horas más peligrosas
Pasar por la calle 9 de diciembre no parece ser una gran hazaña en el día, tomando en consideración que es altamente concurrida por padres y representantes, quienes acuden con la muchachada a la Unidad Educativa «Virgen del Rosario» y al Colegio «Elías Calixto Pompa», los cuales se encuentran cerca.
Además como ya se dijo, cerca funcionan oficinas de la Alcaldía de Zamora y se ubica uno de los centros comerciales mayormente visitados de la jurisdicción.
No obstante, hay momentos del día en los que la calle queda desolada y preparada para que delincuentes que andan a bordo de motocicletas empiecen a hacer de las suyas, a veces hasta incluso burlando el despliegue policial que, según indicaron quienes por allí transitan, no se perciben las 24 horas del día.
Impotencia entre asaltados
La consulta a los afectados tuvo que hacerse sin que los mismos aportaron datos de identificación, dado que temen a represalias. Sin embargo, aprovecharon la presencia de la prensa para solicitar la intensificación de los dispositivos de seguridad a la Policía de Zamora.
«No es posible que teniendo cerca oficinas de la Alcaldía a donde el usuario asiste a diario y que cerca estén al menos tres agencias bancarias, los malandros hagan lo que quieren. Gracias a Dios ningún evento ha pasado a mayores; pero queda la rabia y la impotencia en quienes viven desagradables momentos cuando van a sacar plata del cajero o en quienes llevan sus teléfonos celulares y deben entregarlos para que no los maten, debido a que a veces los asaltos son a mano armada», expresaron.
Dijeron también que las horas nocturnas suelen ser peligrosas, pues la calle 9 de diciembre carece de alumbrado público, poniendo en riesgo a quienes laboran hasta bien entrada la tarde y que luego deben salir de sus trabajos con todo guardado y a veces sin nada encima, en aras de no ser víctimas de delincuentes.
Yohadi Arteaga
yohaarteaga@gmail.com