Al menos 26 personas murieron el jueves en Irak después de que los insurgentes colocaran bombas en carreteras y detonaran vehículos cargados de explosivos en Bagdad y otros lugares del país, dijo la policía.
Esto eleva a 48 el número de muertos producto de la violencia en los últimos dos días. Grupos armados detonan casi a diario múltiples bombas activadas con temporizador o control remoto en la capital iraquí, reseñó la agencia Reuters.
La violencia subió a su nivel más alto en 2013, cuando murieron casi 8.000 civiles. Las fuerzas de seguridad luchan contra insurgentes suníes en la provincia occidental de Anbar, donde los insurgentes del Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL) invadieron la ciudad de Faluya el 1 de enero.
En menos de 30 minutos, tres coches bombas estacionados explotaron el jueves en barrios chiíes de Bagdad. Un coche bomba instalado en el distrito chií de al-Ammal, ubicado al oeste de la capital, dejó cuatro muertos y 12 heridos en una calle comercial muy concurrida, dijo la policía.
En Karrada, una adinerada zona chií, un coche bomba explotó matando a dos personas e hiriendo a 16, dijo la policía. Un tercer coche bomba explotó frente al mercado de Bab al-Shargi, en el centro de Bagdad, matando a dos personas e hiriendo a 10.
En tanto, una bomba explotó en Sadr City, un distrito de clase trabajadora de Bagdad mayoritariamente chií, matando a cinco personas e hiriendo a 12.
Después de los ataques, las fuerzas de seguridad cerraron dos puentes importantes que unen Bagdad oriental y occidental y que están ubicados cerca de Green Zone, un lugar donde está la sede del Gobierno iraquí y algunas embajadas extranjeras.
Más tarde, una bomba mató a un policía e hirió a ocho en la calle Palestina, una zona chií del este de Bagdad.
Los cinco atentados golpearon barrios que han sido duramente atacados en los últimos meses por ISIL y otros grupos militantes para provocar a la mayoría chií de Irak y desacreditar al Gobierno.
Más temprano el jueves, una bomba mató a cuatro personas en un café de un distrito chií de Kanaan, una ciudad ubicada en la provincia de Diyala, al este del país, dijo la policía.
Veintidós personas murieron el miércoles, la mayoría de ellas en atentados contra los distritos capitalinos de Karrada y Sadr City.