En el número 1600 de la avenida Pensilvania pudieron escucharse anoche voces insignes de la música soul de distintas generaciones, como las de Franklin, Patti LaBelle, Melissa Etheridge, Tessanne Chin, Jill Scott, Janelle Monáe y Ariana Grande
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, mostró su «respeto» a todas las divas del soul y en especial a la «reina» de este estilo de música, Aretha Franklin, durante un concierto que llenó de ritmo y voces legendarias la Casa Blanca. Obama protagonizó la anécdota de la noche cuando se equivocó al deletrear «Respect» (respeto), el título de la emblemática canción de Franklin y del que el presidente olvidó la primera «e», lo que arrancó las carcajadas del público. El concierto, que la Casa Blanca emitió en directo en su web, forma parte de la serie «In performance at the White House», que desde 1978 ha llevado a la residencia más famosa del país a los artistas legendarios de la música estadounidense. En el número 1600 de la avenida Pensilvania pudieron escucharse anoche voces insignes de la música soul de distintas generaciones, como las de Franklin, Patti LaBelle, Melissa Etheridge, Tessanne Chin, Jill Scott, Janelle Monáe y Ariana Grande. »Cuando Aretha nos dijo por primera vez lo que significaba ‘R-s-p-e-c-t» -su canción ‘Respect’-, ella no tenía ni idea de que se convertiría en el grito de las protestas de los afroamericanos, las mujeres y todos los que se sentían marginados por su apariencia o por a quién amaban», dijo Obama. En su alocución también defendió el poder de la música, la riqueza cultural de Estados Unidos y la carrera inspiradora de las divas del soul, por haber luchado con mucho esfuerzo para llegar a lo más alto. »Ellos querían respeto. Después, cuando alguien le preguntó por qué tuvo tanto impacto, ella dijo: ‘Supongo que todo el mundo quiere un poco de respeto'», concluyó el presidente.