Los adolescentes argentinos no podrán realizarse cirugías estéticas antes de los 18 años a menos que sean casos terapéuticos o de adecuación de género, si el Congreso aprueba un proyecto de ley del Gobierno.
El objetivo de la norma es evitar los abusos, en un país donde las operaciones de aumento de busto y glúteos, entre otras, crecieron un 500% en los últimos cuatro años, según el IV Congreso Argentino de Especialidades en Medicina Estética celebrado en febrero de este año.
No hay estadísticas, en cambio, que precisen cuántas cirugías de belleza corresponden a menores de 18 años.
La diputada Mara Brawer (peronista, gobierno), impulsora de la iniciativa anunciada el lunes de noche, dijo que las dolescentes se someten «al poder de un mercado que exige cuerpos normados».
Argentina está entre los 25 primeros países donde se practican cirugías plásticas con fines de imagen y belleza, según un estudio de la Sociedad internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS).
«Las cirugías estéticas producen marcas corporales, promueven y consolidan estereotipos y patrones culturales homogeneizadores y ponen en riesgo la salud física y emocional», agregó Brawer.
La legisladora dijo que cuando era funcionaria del ministerio de Educación, detectó que entre las mayores preocupaciones de los padres estaban el embarazo adolescente y la falta de aceptación de sus hijos del cuerpo que tenían.
AFP