Las autoridades no descartan ninguna hipótesis en el doble crimen en que perdieron la vida los ciclistas, Gustavo Giménez, de 40 años, y Luis Daniel Gómez, de 36 años de edad, desaparecidos desde el sábado y hallados muertos con heridas de bala en el Parque Nacional El Ávila este domingo. Los occisos eran amigos muy cercanos del dirigente de Voluntad Popular, Leopoldo López, detenido desde el 18 de febrero pasado.
En manos de la División contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) están las averiguaciones del caso. Llama la atención en las investigaciones que los asesinos no hayan despojado a sus víctimas de las bicicletas que conducían, debido a lo costosa que eran, y tampoco el lujoso reloj de pulsera que uno de ellos tenía puesto.
La experticia hecha a los cadáveres y la inspección del sitio del suceso indican que ambos fueron golpeados y arrastrados en el cerro. Durante la inspección de los cuerpos, se pudo apreciar que ambos tenían excoriaciones en las piernas.
El Cicpc interroga al entorno social, laboral y familiar de las víctimas. Además, tratan de establecer si algún visitante del Parque el Ávila logró ver a personas en la zona donde se produjo el doble homicidio.
Las pesquisas indican que los sujetos mataron a Giménez y Gómez para luego apoderarse de sus teléfonos, con los cuales iniciaron la negociación con los familiares de ambos para cobrar un rescate que no llegó a realizarse porque no pudieron dar una fe de vida. Los expertos en telefonía hacen un rastreo de las llamadas hechas por los homicidas desde los celulares de las víctimas.
Presumen que Giménez y Gómez, que solían tomar esa ruta con sus bicicletas y por eso sus amigos los encuentran este domingo, fueron sorprendidos por estos sujetos que los mataron y que al percatarse de quienes eran intentaron simular un secuestro para cobrar un rescate.
AA