Japón anunció que mató 251 ballenas durante su campaña anual de «pesca científica» en el océano Antártico, la última tras la prohibición ordenada recientemente por la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
El dato, revelado el martes por la Agencia Japonesa de Pesca, es superior al de la campaña anterior (103), aunque muy inferior respecto al objetivo fijado de en torno a 935 ballenas, en la campaña del pasado 3 de enero al 13 de marzo.
Obligado por la CIJ, la más alta instancia judicial de la ONU, Japón anunció el 3 de abril que renuncia por primera vez en 27 años a cazar ballenas en el Antártico. La campaña debía comenzar el próximo invierno y durar dos o tres meses.
Australia, con el apoyo de Nueva Zelanda, llevó a Japón ante la CIJ en 2010 en un intento de poner fin a estas prácticas en la Antártida.
AFP