Los negociadores de las Farc resaltaron ayer que el verdadero compromiso con la paz no es «actuar como perdonavidas», en alusión a la afirmación del presidente Juan Manuel Santos de que en este momento del proceso «pensaría dos veces» una orden contra el jefe máximo de esa guerrilla.
Tras leer el texto, el propio Márquez indicó a periodistas que con esa declaración las FARC responden al comentario en el que Santos reconoció ayer que en este momento del proceso de paz «pensaría dos veces» una orden de acabar con el jefe máximo de la guerrilla, «Timochenko», aunque está «más o menos» localizado.
«Más o menos sabemos dónde está ‘Timochenko'», dijo Santos en una entrevista a una emisora colombiana, en la que advirtió de que su postura de cautela ante la posibilidad de acechar al líder guerrillero en este punto del proceso de paz no implica debilidad frente a las FARC.
«Timochenko», alias de Rodrigo Londoño Echeverri, es el sucesor de «Alfonso Cano» o Guillermo León Sáenz, quien murió en combates con la fuerza pública en noviembre de 2011, exactamente un año antes de que comenzaran en Cuba los diálogos de paz entre el Gobierno de Santos y la guerrilla.
En el comunicado divulgado este viernes ante medios de comunicación en La Habana, los negociadores de las Farc insistieron por otro lado en la urgencia de crear una comisión que esclarezca las causas históricas del conflicto de cara al futuro debate sobre víctimas.
Con esa declaración, las FARC dieron por concluido el vigésimo tercer ciclo de las conversaciones que continuó centrado en el tema de drogas y narcotráfico, y que está en debate desde noviembre pasado.
Agencias