Fieles devotos al Nazareno de San Pablo, afirmaron que para este año, todos los artículos religiosos aumentaron de precio, por lo que, cumplir con el Nazareno esta Semana Santa es más caro
“Antes una caja de velones costaba 1.300 bolívares ahora está a 2.000 bolívares, y la de velas pequeñas subió de 230 a 400 bolívares. No puedo vender demasiado caro porque la gente tiene menos dinero ya que gasta más en lo más necesario como la comida”, indicó Yenevit Álvarez, comerciante.
Por su parte, las estampas se mantienen a 10bs, pero “el paquete de incienso varió de 20 a 40 bs, porque el kilo lo conseguimos en 500Bs y no podemos excedernos”, indicó Yulimar Továr.
Peregrinos que recorren los puestos para conseguir insignias para cumplir con promesas, indicaron que algunos precios se mantienen mientras que otros excedieron demasiado, “entendemos que a los vendedores les aumentan los precios de su mercancía pero no por eso es para elevarlos tanto, el año pasado compre estampas, cordones de credo, velas, incienso precio comprensible pero este año sólo he comprado el incienso nada más”, afirmó Johan Carlos Contreras, peregrino.
Todo subió de precio
El precio de las flores, otro signo de ofrenda de los feligreses en la Semana Santa, se duplicó de 15 a 30 bs la unidad. El valor de cada flor es el mismo para las rosas, ave del paraíso, girasol o margarita pintada.
Teresa Herminia, feligrese, indicó que, “quería cambiar mi túnica para vestirme de Nazareno pero este año los precios están elevados, como es posible que de 180 ahora estén en 500”.
Los precios de las imágenes religiosas también subieron desde la Semana Santa pasada. La estatuilla de El Nazareno tipo barroco italiano que costaba 50 y 80 bolívares en tamaños pequeño y mediano, respectivamente, pasó a 150 y 225 bolívares, lo que refleja un alza de entre 181% y 200 %. “Las de yeso no aumentaron mucho desde el año pasado”, dijo Yolanda Rodríguez, que las vende a 10,20 y 50 bolívares, según el tamaño.
“Nos venden al detal”
Los comerciantes señalaron que los distribuidores ya no venden al por mayor, “ahora te venden máximo una docena.
Esa modalidad la impusieron los chinos, consentidos del gobierno, además de que los productos fabricados en China son de menos calidad”, aseveró Xiomar Benito Adrianza, que trabaja desde hace 12 años en Santa Teresa en la venta de estampitas, llaveros, medallas, gorras y rosarios, entre otros artículos religiosos. Refirió que la mercancía de calidad viene de Colombia, Brasil e Italia.
Shirley Zambrano / LaVoz