*** Por el camino que se transita, la realidad es que el remedio ahora es peor que la enfermedad. La nuestra es una economía parasitaria que no permite el progreso y que tiene como característica una escandalosa inflación que afecta a todos los sectores de la sociedad
El Gobierno se pasea por diversos escenarios. Aparenta estar fuerte. Finge un bienestar inexistente, avanza en su intento “ideologizador” y tiene en puertas la Ley de las Comunas para su aprobación desconociendo la real situación del país y las continuas protestas que ya van para tres meses.
Ha preferido la terquedad por encima del entendimiento privilegiando su modo subjetivo de ver las cosas mientras la otra parcialidad sigue dispuesta a mantenerse en la acera del frente reclamando cambios y reivindicaciones.
Con tantos frentes abiertos es difícil gobernar a menos que se haga -como en efecto se hace- de manera coercitiva obligando y oprimiendo a una sociedad que ante la bonanza petrolera merecía mucho más que el gasto dispendioso que ha ocurrido en todos estos años comprometiendo seriamente nuestro futuro.
Los paños calientes con los que se ha pretendido gobernar, están a punto de generar un colapso general que superará con creces las múltiples dificultades que terminaron desprestigiando a los actores de la cuarta.
Por el camino que se transita, la realidad es que el remedio ahora es peor que la enfermedad. La nuestra es una economía parasitaria que no permite el progreso y que tiene como característica una escandalosa inflación que afecta a todos los sectores de la sociedad.
Rumbo al abismo
Mientras otras naciones abrazadas al socialismo del siglo 21, incluyendo las más ortodoxas hacen esfuerzos por deslastrarse de lo anacrónico, Venezuela se empeña en ir a la inversa.
Las alianzas estratégicas con otras naciones terminan siendo importantes mientras haya reciprocidad, que no es precisamente nuestro caso con Cuba.
¿Cuál es la compensación que recibe Venezuela por ese torrente de petróleo que le enviamos a Cuba?
La sensación de la calle y del ciudadano común es que estamos entregando todo a cambio de una cartilla que cada nos conduce hacia el abismo.
Esa es una de las razones y causas de la protesta. Los jóvenes sienten en este momento que si no luchan ahora tienen prácticamente secuestrado su futuro.
La terquedad del gobierno ha roto varios moldes, pero se ha valido de la ambigüedad y la división de algunos factores políticos para ganar tiempo y pretender confundir a la comunidad internacional de que en efecto hay disposición para el diálogo.
Los frutos del diálogo si alguien quiere saciarse y justificarse fueron para demostrar que unos hablan mejor que otros, que la gente dentro y fuera del país permitió establecer diferencias, pero con eso no se va al mercado.
Por el contrario, al Gobierno el tiempo le ha servido para avanzar con su Ley de Comunas que generará la natural repulsa del sector opositor y probablemente sea un argumento más para la protesta, esta vez podría estar motorizada por la MUD porque le toca directamente sus intereses.
En condiciones tan turbulentas es difícil que el Gobierno pueda zafarse de esa camisa de fuerza que tiene con Cuba porque esta alianza ha penetrado todas las instituciones con fortaleza suficiente para controlar la situación, contrario a lo que piensan Diosdado Cabello y otros líderes prominentes del Psuv que se han deslindado del intervencionismo antillano y que no manifiestan su inconformidad sencillamente porque el hecho agravaría más la situación. Y quiérase o no, también están sometidos a esa famosa camisa.
Se desconoce y se
subestima la protesta
Ahora salen a la escena otros factores. Una nueva ofensiva económica y una Ley de Precios que terminará por asfixiar a lo que queda de sector productivo incentivando la fuga de los pocos capitales dispuestos a invertir en el país.
También aparece un nuevo pensum de estudios que es una grave afrenta a la sociedad y a la familia con la maniática tendencia por alienar la formación de nuestros hijos. A ello súmenle el incremento del pasaje que aspira ser compensado con un aumento de sueldos de manera escalonada con lo cual el estado, que es el gran empleador, incluyendo alcaldías y gobernaciones, comenzará a afrontar severos problemas fiscales a causa de una inexistente planificación presupuestaria, las cuales se manejan bajo aquella conseja de «como vaya viniendo, vamos viendo».
La Ley de las Comunas es un capítulo aparte. Se trata de un viejo proyecto que se había engavetado ante tantos problemas surgidos por la penosa circunstancia de la salud de Chávez, sin embargo, como está en la agenda de nuestros interventores antillanos, sale al ruedo y se da como un hecho su aprobación con lo cual se fortalece el centralismo, el sectarismo, la ineficiencia y se termina de conculcar los últimos resquicios de autonomía que quedan en el país.
Son muchos los frentes abiertos, se desconoce y se subestima la protesta, pero la erosión sigue su curso.
Eso sí, para bailar un tango se necesitan dos. Y uno de ellos esta distraído esperando a Godot.
Para que vean que el teatro del absurdo de Samuel Beckett aún tiene vigencia.
ARENA Y CAL
*** SE EFECTUÓ en Caracas una reunión de embajadores para dar a conocer la estrategia del gobierno que busca suavizar la imagen internacional. El gran detalle es que se hizo venir a todos nuestros representantes cuando bien se pudo hacer bajo el uso de las nuevas tecnologías, teleconferencia o vía Skype. El convite costó unos cuantos milloncejos verdes.
*** MÁS del aeropuerto de Coche. Aparte de guiso chévere ahora nos enteramos que la aeroplaza no está operativa, sino que lo inaugurado fue la terminal porque la pista aún no reúne las condiciones para el aterrizaje de aviones. Hasta a Maduro lo engañaron en esta farsa.
*** VARGAS LLOSA. El escribidor peruano estuvo en el país invitado para participar en un foro de Cedice. Al llegar a Venezuela contrastó el tono de su lenguaje con el expresado desde Madrid donde vive. Quizás el largo encuentro con los agentes de seguridad del aeropuerto ablandaron sus expresiones. No sabemos hasta qué punto su presencia coadyuva en este proceso de crisis. Una cosa para nosotros es es Mario el intelectual y Vargas Llosa otra el político.
*** DURO ABRIL. Este mes golpeó duro. El jueves santo, de un solo golpe nos dejaron Cheo Feliciano, García Márquez y Mayra Alejandra. Luego el maestro Vigas y el músico Benjamín Brea. Nubes negras que componen el mosaico de la vida. Mes para el olvido.
*** HACE algún tiempo informamos sin equivocarnos sobre la compra del diario Las Américas en Miami por parte de Miguel Henrique Otero y Nelson Mezerhane. Luego dijimos que era casi un hecho la venta de la Cadena Capriles y también adelantamos que las negociaciones para hacerse de El Universal por parte del gobierno iban avanzando. El miércoles se corrió el rumor de que la venta era un hecho. No pudimos confirmarlo, pero por ahí van los tiros. Si no es ahora, será después. Andrés Mata no aguanta más presión.
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