Los maestros piden mejores salarios porque dicen que son los trabajadores peor pagados del Estado colombiano
Cerca de nueve millones de estudiantes de escuelas públicas colombianas están sin clases desde este miércoles por una huelga de profesores que el Gobierno recibió con sorpresa pues había llegado a un principio de acuerdo con la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode).
«Hoy en el país, el magisterio a nivel nacional, se encuentra en paro», dijo en una rueda de prensa en Bogotá el presidente Fecode, Luis Grubert.
Según el dirigente, es necesario buscar «la salida a este conflicto laboral que afecta a 8,7 millones de niños, que impacta a 334.000 educadores» y que, agregó, «amerita que por parte del Gobierno nacional se le preste la debida atención».
Los maestros piden mejores salarios porque dicen que son los trabajadores peor pagados del Estado colombiano, un mejor servicio de salud y que se modifique el sistema de evaluación del profesorado, que sirve de base para definir ascensos.
Sin embargo, la ministra de Educación, María Fernanda Campo, expresó su extrañeza con la decisión de Fecode de iniciar la huelga, pues anoche se había alcanzado un acuerdo con la comisión negociadora de ese sindicato.
Según Campo, el acuerdo abarca los tres puntos fundamentales que reclaman los profesores, pues se acordó «mejorar las condiciones de salud, mejorar las condiciones económicas gracias a un programa de nivelación salarial y mejorar y fortalecer las condiciones de evaluación de nuestros docentes para mejorar la calidad de la educación».
El presidente de Fecode aseguró que mientras el acuerdo no esté completamente cerrado, «la decisión de paro se mantiene y hoy en Colombia hay paro nacional del magisterio».
Según Grubert, esta evaluación «se convirtió en un instrumento que no impacta en nada la calidad de la educación sino que descalifica para que los maestros no puedan ascender y mejorar sus ingresos. Es contra eso que estamos».
«Pedimos que la evaluación de competencias se suspenda y se habiliten otros criterios para que los compañeros puedan ascender. Este sí es un punto innegociable», afirmó.
Agencias