*** El comisario preso en Ramo Verde lamentó que se desestimara la medida humanitaria solicitada por tecera vez, «con base a un informe de hace ocho meses», debido a que, sostuvo, fueron desechados «los últimos cuatro informes”, incluyendo dos de juntas médico militares, los cuales determinan su precaria condición de salud
CARACAS – El comisario venezolano Iván Simonovis, de 54 años, anunció ayer que este domingo levantará la huelga de hambre que inició el pasado martes en la cárcel militar de Ramo Verde en Los Teques, donde cumple 30 años de prisión por la violencia registrada durante el golpe de Estado de 2002 a Hugo Chávez.
«Suspenderé la huelga de hambre mañana (hoy) 1 junio. Dejaré que los venezolanos honestos continúen por la lucha de mi libertad», escribió Simonovis en la red social Twitter.
El comisario admitió que con su medida de fuerza presionó «por una respuesta que el tribunal» que hace cinco años lo condenó «debió dar hace 10 meses», cuando pidió por tercera ocasión su excarcelación como una medida humanitaria por razones de salud.
En un fallo promulgado hace tres días, la Justicia «igual» le «negó la medida», lamentó Simonovis tras sostener que su suerte se decidió «con base en un informe de hace ocho meses», debido a que, sostuvo, fueron desestimados «los últimos cuatro informes, incluyendo dos de juntas médico militares».
La justicia ha negado en tres ocasiones medidas humanitarias a favor de Simonovis, condenado en 2009 a 30 años de prisión por los sucesos del golpe que en 2002 derrocó brevemente al entonces presidente Hugo Chávez, fallecido en 2013.
Precaria salud
La esposa del comisario, Bony Pertiñez, que insiste en la inocencia de su marido en las muertes durante la intentona, ha señalado que su esposo «está muy mal de salud» debido a una osteoporosis severa, hipertensión y otras 18 patologías.
La MUD ha pedido «gestos» al Gobierno venezolano, como la excarcelación de Simonovis, que traduzca en hechos las conversaciones de la mesa del diálogo, que continúa abierta aunque sin reuniones desde hace semanas.
El Gobierno venezolano ha rechazado en varias oportunidades que en la mesa de diálogo se pueda acordar la anulación de casos judiciales porque ello alentaría la impunidad.