El nuevo mandatario prestó juramento frente a 13 jefes de estado y gobierno, representantes de más de 100 delegaciones internacionales y más de 6.000 invitados a la ceremonia solemne en el Anfiteatro del Centro Internacional de Ferias y Convenciones de la capital salvadoreña
Salvador Sánchez Cerén asumió el domingo como el primer ex guerrillero en gobernar El Salvador y en su discurso de envestidura, anunció que estará a la cabeza del combate contra la delincuencia y convocó a los salvadoreños a trabajar por un acuerdo de nación que permita resolver los principales problemas que afronta el país.
«¡Sí, protesto!», dijo Sánchez Cerén al momento que el presidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, le tomó el juramento y le impuso la banda presidencial, con lo que quedó investido como nuevo presidente de la nación centroamericana para los próximos cinco años.
Miles de correligionarios del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) rompieron en un prolongado aplauso y coreaban «Sí se pudo, sí se pudo, sí se pudo».
«Después de largos años de lucha por la justicia y la democracia en mi país, recibo con humildad y profundo respeto la banda presidencial, la recibo con el compromiso de ejercer la presidencia para todos los salvadoreñas y todas las salvadoreñas, aquí y en el exterior, ejerceré la presidencia con honradez, austeridad, eficiencia y transparencia», manifestó.
Prometió que trabajará «para alcanzar los grandes acuerdos de nación que nos permitan resolver los principales problemas del país y que faciliten la construcción de los cambios estructurales que El Salvador necesita» y dijo que «la participación ciudadana será fundamental en mi gobierno».
«Buscamos el respaldo de toda la sociedad para la creación de políticas públicas encaminadas a las prioridades del país: empleo, seguridad y educación», expresó.
Sánchez Cerén anunció que al asumir la presidencia se coloca al frente del Sistema de Seguridad Ciudadana para combatir la alarmante violencia que vive el país, provocada en su mayoría por las maras o pandillas y llamó a la unidad nacional para lograr un país libre de violencia.
«La seguridad ciudadana requiere que trabajemos unidos contra el crimen organizado, el narcotráfico, las extorsiones y toda expresión de violencia» y advirtió que van a combatir la delincuencia en todas las formas, con todos los instrumentos legales y coercitivos.
Anunció que la Policía Nacional Civil, creada con los Acuerdos de Paz, se fortalecerá y que harán una profunda depuración de la institución.
«Vamos a fortalecer las instituciones que tienen el mandato constitucional de prevenir, combatir y castigar el crimen, y juntos garantizamos la paz en cada uno de los territorios», agregó.
Sánchez Cerén se comprometió también a trabajar contra la corrupción y dijo que «los recursos del pueblo son sagrados y solo se usarán para favorecer al desarrollo y bienestar del mismo».
«Este gobierno lo iniciamos con mucha esperanza y alegría», dijo Sánchez Cerén al dirigirse al pueblo salvadoreños en cadena nacional de radio y televisión, y «esto solo es posible por la labor de nuestros héroes y mártires, aquellos hombres y mujeres, personas visionarias que entregaron sus vidas y soñaron con un país en democracia».
Ingreso a Petrocaribe
El nuevo presidente salvadoreño rindió tributo público a «los hijos e hijas de este pueblo que derramaron su sangre luchando por la justica».
Anunció que en esfuerzo de hacer crecer la economía del país, «estamos en avanzadas conversaciones respecto al ingreso de El Salvador a Petrocaribe». Al ingresar a Petrocaribe, «nos darán más oportunidades de desarrollo a través de plazos es interesas más favorables e impulsarán el comercio exterior», afirmó.
Marcos Alemán / AP