Habitantes aseguran que el agua de lluvia corre por las paredes
48 familias provenientes de diversos refugios de Caracas, a las que les fueron adjudicadas sus viviendas en el Complejo Urbanístico OPPPE 13, ubicado en la calle El Cristo de Catia, denunciaron las pésimas condiciones de los inmuebles, que a tan sólo cuatro meses de haber sido habitados ya presenta grietas y filtraciones en casi su totalidad
La ilusión de tener una casa digna le duró poco a las 48 familias que habitan en el Complejo Urbanístico OPPPE 13, ubicado en la calle El Cristo, de Catia, ya que al mes de haberse mudado provenientes de diversos refugios de Caracas, las paredes de sus nuevos apartamentos comenzaron a agrietarse.
“Estamos reviviendo de nuevo el temor que sentíamos en el rancho. Cuando nos dijeron que nos iban a entregar las casas brincábamos de felicidad, llegamos y todo estaba muy bonito pero a medida que pasaban los días comenzamos a ver como aparecían grietas en el piso y marcos de las puertas y ventanas”, narró Ana Díaz, quién vive con su esposo y dos hijos.
A cuatro meses de haber llegado a la edificación construida por el Gobierno en el marco de la Misión Vivienda, la situación se ha venido agravando de manera progresiva, denuncian que no hay apartamento que no presente filtraciones en las paredes y techos, así como aseguran que las cerámicas de los baños y cocinas están partidas.
Esto debido a que el agua de lluvia recorre desde el techo del edificio hasta el piso uno, mojando las paredes y suelos socavando de esta manera el material. “Esta no es la vivienda digna que nos prometieron, de hecho seguimos estando en alto riesgo, las paredes que dan hacia la parte de afuera del edificio se están separando, nos da miedo hasta asomarnos a las ventanas”, indicó Suyin Morales, quien vive junto a su esposo e hija.
“La paredes tiemblan”
Mientras se suben las escaleras del edificio se puede sentir cómo tiembla, eso lo pudo constatar el equipo de Diario La Voz, durante un recorrido hecho en las instalaciones del lugar. El miedo y la decepción es el sentimiento que ahora domina la vida de los habitantes del OPPPE 13, quienes afirman que nunca imaginaron que estas eran las condiciones que se iban a encontrar luego de haber estado dos años pasando trabajo en un albergue.
A medida que transcurren los días, se acumulan más y más grietas en las paredes de drywall, lo que le hace pensar a los habitantes que se pueda estar presentando algún movimiento de tierra que este causando las fisuras.
“Algo que nos resulta curioso es que las puertas de los cuartos y baños cerraban sin problema, ahora unos meses después chocan con los marcos y el piso. También hemos notado pequeños desniveles en el suelo”, dijo.
Pese a que los ingenieros les aseguran que la obra es antisísmica, los residentes dudan de ello, no sólo por las grietas en las paredes o los desniveles en pisos y puertas, sino incluso dicen sentir cómo se mueven las paredes cuando pasa un vehículo de carga pesada por la calle.
“Pedimos que se coloquen bloques por lo menos en las paredes que bordean los apartamentos, las divisiones no nos importan pero si las paredes de afuera estamos corriendo un riesgo innecesario”, reclamó Tomás Lombardo, quien por casi dos años habitó junto a otras familias en uno de los espacios habilitados para damnificados en el Instituto Nacional de Deportes (IND).
“Somos revolucionarios”
En cada uno de los apartamentos que conforman el Complejo Urbanístico OPPPE 13, se pueden apreciar afiches y fotografías de Hugo Chávez, y es que los habitantes aseguran que pese a su situación, apoyan al mandatario nacional.
“Estamos con la Revolución y somos chavistas cien por ciento. Nosotros sabemos que no es culpa de nuestro Presidente, que es la gente que está con él, por eso queremos hacerle saber todo lo que aquí está pasando”, dijo Tomás Lombardo, quien junto a su esposa Kimberly González, responsabilizan a el ministro Farruco Sesto y a la Oficina Presidencial de Planes y Proyectos Especiales (Opppe), por las condiciones del edificio.
“Pensamos que esto lo hicieron de manera muy apresurada y aquí están las consecuencias, el material usado para la construcción no es el adecuado”, acotaron al tiempo que le exigieron al Ejecutivo Nacional que resuelva la problemática y se inicien las obras necesarias para fortalecer las paredes del edificio y así evitar que el agua de lluvia se filtre a través de ellas.
Más filtraciones
Otra de las problemáticas a las que se enfrentaron los habitantes del edificio OPPPE 13, en Catia es que un mes después de haber sido habitado el agua de los baños se filtraba en las paredes de los cuartos y hasta en el techo.
Pese a que desconocen las verdaderas causas de la filtración hicieron el reclamó por lo que la constructora encargada de la obra debió reparar el daño que se presentaba en el 100% de los sanitarios del lugar.
Por otro lado, reclamaron que el ascensor tiene un mes y medio se haberse dañado y aún no han ido a repararlo. “Dicen que hay que esperar a que llegue un repuesto y que sin eso no pueden hacer nada. Hace una semana tuve que sacar a mi hijo escaleras abajo, porque le dio un ataque de asma”, manifestó Kimberly González, quien vive en el piso 10.
Nelyabith Bello
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Fotos: Jaime Manrique
