Dos periodistas rusos de un canal de televisión ruso murieron el martes impactados por un proyectil en el este de Ucrania, informó el canal Rossiya 24.
El corresponsal Igor Kornelyuk, de 37 años, murió en el quirófano del hospital a donde fue llevado tras ser herido durante su asignación en Lugansk. Inicialmente se desconocía el paradero del ingeniero de sonido que lo acompañaba, Anton Voloshin, pero después se confirmó que también falleció.
Las autoridades rusas expresaron su enojo por las muertes. El primer ministro Dimitri Medvedev dijo que el gobierno ucraniano debe ser considerado responsable, mientras la agencia de investigaciones rusa anunció que abriría una investigación penal.
Viktor Denisov, un camarógrafo que trabajaba con Kornelyuk, dijo en una transmisión televisada que estaban grabando video de refugiados ucranianos al norte de la capital regional cuando empezaron a caer morteros. Denisov estaba al lado de Kornelyuk cuando fue herido.
Antes de anunciarse la muerte de Voloshin, la agrupación Reporteros sin Fronteras, con sede en París, dijo que Kornelyuk era el cuarto periodista que muere en Ucrania desde comienzos de año.
Explota un
gasoducto
Una explosión afectó el martes el gasoducto que lleva gas natural ruso a través de Ucrania hasta Europa, lo que hizo que el gobierno de Kiev sospeche que de un posible atentado terrorista.
La explosión, lejos de donde las fuerzas del gobierno combaten a los separatistas pro rusos, ocurrió un día después que Rusia interrumpió el suministro de gas a Ucrania por una disputa sobre el precio del combustible y pagos vencidos.
La compañía gasera ucraniana Naftogaz informó que el flujo de gas a Europa se mantuvo a través de un gasoducto paralelo de reserva. El operador eslovaco del sistema, Eustream, dijo que no notó una caída en la presión del gas de Ucrania a Europa tras el incidente. AP