El delantero uruguayo estará desde el inicio en el encuentro ante Inglaterra, de vital importancia para ambos conjuntos
El técnico de Uruguay, Oscar Tabárez, ya se aseguró la presencia del «Rey» Luis Suárez, su máxima estrella y goleador, en el decisivo partido del próximo jueves frente a Inglaterra, y ahora busca el o los comodines que desde el centro del campo puedan frenar la potencia inglesa.
El técnico que, pese a la intervención quirúrgica a la que fue sometido a finales del pasado año para superar lo que él calificó como «un problema mecánico» en la columna, sigue teniendo dificultades de movilidad, estuvo especialmente activo en el campo preparando el entrenamiento de sus dirigidos.
Así, en los 15 minutos habitualmente abiertos a la prensa de los entrenamientos celestes en el estadio Arena do Jacaré de Sete Lagoas, se pudo ver a Tabárez en el centro del campo dialogando con su principal ayudante Mario Rebollo, agitando sus brazos y dando claras indicaciones sobre zonas y posibles movimientos.
Inglaterra «no cambia su forma de jugar mas allá de los nombres que integren el equipo», dijo Tabárez en la víspera.
La selección inglesa «tiene atacantes muy veloces y de gran potencial técnico». «Nosotros intentaremos limitarlos y estar muy atentos a su juego aéreo», agregó el entrenador celeste en conferencia de prensa.
Además tuvo una referencia especial para Steven Gerrard, centrocampista del Liverpool, de quien dijo es el «termómetro inglés» a controlar.
Una vez que Tabárez decidió el retorno de Suárez al equipo titular, encontrar el comodín que anule o al menos controle las asistencias de Gerrard es el gran objetivo.
Suárez, compañero de Gerrard en el Liverpool, máximo goleador histórico de los celestes, volverá al once titular tras la artroscopia a la que fue sometido en su rodilla izquierda el 22 de mayo.
La recuperación de la lesión lo dejó fuera del partido frente a Costa Rica donde los celestes perdieron 1-3 y extrañaron una barbaridad la aportación de su goleador, por lo que hace pero también por la preocupación que genera en los rivales.
Esa parte Tabárez ya la tiene resuelta. Ahora la cuestión pasa por saber cómo controlar a los ingleses en una zona del medio campo donde Uruguay estuvo flojo frente a los costarricenses que, especialmente en la segunda mitad, prácticamente manejaron el balón a su antojo.
Si la situación se repite frente a Inglaterra, Uruguay puede ir preparando las maletas porque el regreso a Montevideo está casi garantizado.
Frente a los ticos el todoterreno Egidio Arévalo Rios se debatió casi en soledad frente al buen trato de balón rival porque su compañero en los marcajes, Walter Gargano, apareció lento y llegando tarde, quizás producto de la temperatura claramente por encima de los 30 grados con que se jugó el partido.
Lo cierto es que el habitual medio campo uruguayo, donde la entrega para recuperar rápidamente el balón es marca de la casa, estuvo desconocido.
Tabárez analiza dar una integración bastante diferente a ese medio campo con el ingreso de Álvaro González con la referencia directa del «cerebro» inglés, aunque el entrenador no es partidario de los marcajes «espejo».
Además, Nicolás Lodeiro, que puso un poco de claridad en el segundo tiempo frente a Costa Rica, sería titular en lugar de Gargano, dando más juego ofensivo a los celestes, al igual que los ingleses obligados a ganar.
Para el lugar en la defensa que deja la salida obligada de Maxi Pereira, expulsado frente a los ticos, la primera opción es para Jorge Fucile y en menor medida Álvaro Pereira.
La probable alineación celeste estaría integrada por Fernando Muslera; Jorge Fucile, Diego Lugano, Diego Godín, Martín Cáceres; Álvaro González, Egidio Arévalo Rios, Nicolás Lodeiro, Cristian Rodríguez; Luis Suárez y Edinson Cavani.
La vuelta de Suárez, que con 39 goles es el máximo goleador histórico con la camiseta celeste, deja fuera del equipo a Diego Forlán, elegido por la FIFA como el mejor jugador de la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010.
Para Inglaterra, que en la primera jornada del Grupo D cayó por 1-2 frente a Italia, el partido también es vital.