En una firme defensa de la privacidad en la era digital, la Corte Suprema falló el miércoles por unanimidad que en general la policía no puede revisar los teléfonos celulares de las personas que arresta sin conseguir primero una orden de allanamiento.
Los teléfonos celulares son artefactos poderosos que la policía puede hallar en un arrestado, dijo el presidente del tribunal, John Roberts. Debido a que contienen tanta información, la policía debe conseguir esa orden antes de revisarlos, precisó.
«Los teléfonos celulares no son una conveniencia tecnológica más», afirmó el juez. «Con todo lo que contienen y que pueden revelar, representan para muchos estadounidenses las privacidades de la vida».
El mensaje a la policía acerca de lo que debe hacer antes de revisar el contenido de un celular después de un arresto es sencillo. «Consiga una orden de allanamiento», dijo Roberts.
El juez admitió que la prohibición de revisar los teléfonos podría afectar a la policía, pero agregó que «la privacidad tiene su precio».
AP